El descontento, desilusión, escepticismo y hartazgo pudo detectarse en los concentrados ante la actual situación, lamentando muchos de ellos “el desafortunado papel jugado por el Ejecutivo murciano y la patronal murciana al presionarnos hace varios días para desconvocar la primera protesta ante el momento de incertidumbre que padecemos. Nos sentimos engañados”, comentaban los reunidos antes de escuchar el manifiesto leído por Jesús Abellaneda.
Frases como “todos contra nosotros, estamos criminalizados, decepcionados y frustrados después de suspender la convocatoria de hace 15 días” iniciaron el alegato de Jesús Abellaneda ante los concentrados para manifestar posteriormente que “hoy estamos aquí absolutamente desvinculados de nuestra patronal y de la clase política para protestar por unas medidas injustas y carentes de sentido”.
En otro momento, Abellaneda criticó “la nefasta gestión política desarrollada conjuntamente por los Gobiernos de España y de Murcia a la hora de remediar lo que está sucediendo en nuestros negocios, donde nos encontramos sin un adecuado rescate económico” debido a la configuración derivada de “17 criterios distintos” –en clara alusión al Estado autonómico- que sin duda genera “una importante crispación social”. En cambio, Abellaneda valoró positivamente “la buena gestión local” en referencia al Consistorio lorquino dirigido por Diego José Mateos.
Abellaneda afirmó tajantemente que “nos adentramos en una quiebra económica si no volvemos en breve a abrir nuestros establecimientos” pidiendo al Gobierno de López Miras que “derogue el próximo martes derogue el actual decreto de cierre. Si no es así, volveremos a este mismo lugar para seguir luchando por nuestros intereses”, señaló Abellaneda, quien concluyó solicitando al Ayuntamiento de Lorca “la ampliación de las terrazas” además de pedir “unidad política” para hacer frente a la pandemia.