Lo primero que tenemos que hacer es desalar el bacalao de las croquetas y pa ello ponemos bacalao a remojo durante 30 horas . Pasado este tiempo lo secamos y desmigamos.
Preparación de la base de las croquetas
- Cortamos la cebolla en trocitos muy pequeños, reservamos. En una sartén o cazuela ancha vertemos unas gotas de aceite de oliva virgen extra y echamos la cebolla.
- Pochamos a baja temperatura durante 5 minutos hasta que esté translucida. Añadimos el bacalao desmigado, removemos para juntar sabores y retiramos a un plato. Reservamos.
- Calentamos la mantequilla en la misma cazuela en la que hemos preparado la cebolla hasta que se haya derretido.
- Empezamos con preparar la bechamel. En este enlace tenéis todos los secretos para que os quede perfecta.
- Echamos la harina y, con la ayuda de unas varillas. Removemos hasta que veamos que se haya integrado con toda la grasa de la mantequilla. Sin parar de remover y, a fuego medio, cocinamos la harina durante 1 o 2 minutos.
- Vamos incorporando la leche a la cazuela. Primero en pequeñas cantidades, integrándola bien con la harina antes de añadir más.
- Este paso de ir añadiendo la leche poco a poco, es fundamental ya que así nos aseguraremos de que la crema no tendrá grumos.
- Serían unos 10-12 minutos con paciencia, sin parar de remover integramos toda la leche y salpimentamos al gusto.
- Seguimos cocinando la salsa, a temperatura media baja, durante unos 5 minutos, sin parar de remover. Añadimos el bacalao con la cebolla que teníamos reservado y seguimos removiendo hasta que se haya disuelto en la crema.
- Continuamos removiendo hasta que nos quede una masa espesa que se despegará de la sartén o cacerola al remover. Apagamos el fuego y dejamos que la salsa se temple ligeramente.
- En una fuente engrasada con mantequilla y espolvoreada con harina echamos la masa de croquetas y dejamos enfriar un día en la nevera. Así la masa tira más y se manipula mejor.
Empanado, fritura y presentación final de las croquetas de bacalao
- Para el empanado, cuando esté la masa fría, se les da forma con dos cucharas o con la mano. Formamos las croquetas con las manos, dándoles la forma que más nos guste, la ovalada y alargada más tradicional, o redonditas como he hecho en esta ocasión. Las pasamos por huevo batido y luego por pan rallado.
- Dejamos una hora en la nevera, sacamos de la nevera pasado el tiempo y dejamos secar un poco las croquetas antes de freírlas para que el rebozado se resequen un poquito.
- En este punto podemos hacer dos cosas, freírlas para disfrutarlas en el momento o congelarlas para poder hacerlo cuando queramos.
- Admiten la congelación perfectamente. Sólo tendremos que retirarlas del frigo y ponerlas directamente a freír, sin descongelar, con el aceite bien caliente, cuando queramos prepararlas.
- Si sois pocos en casa como es mi caso os recomiendo el tema de la congelación.
- En una cazuela de paredes altas, calentamos abundante aceite de oliva virgen extra suave, para freír. Vamos cocinando las croquetas a fuego alto. Regulando la temperatura para evitar que se nos quemen.
- Retiramos a un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y servimos directamente, recién hechas.