Miembros del Govern y el Parlament,así como la alcaldesa de Barcelona Ada Coloau acudían al homenaje del president Companys entre elogios y aplausos. Entre los asistentes, gritos de ánimo para la presidenta del Parlament. El Vicepresident de la Generalitat, Oriol Junqueras, insistía de nuevo en asumir la unidad y el compromiso del 1 de octubre: "A nosotros nos toca ser firmes en el cumplimiento del mandato, cuidar esta unidad", decía.
Durante su discurso, Carme Forcadell criticó al Gobierno su postura ante el fusilamiento de Companys: "El Estado español aún no ha pedido perdón por el fusilamiento, por el asesinato del president Companys".
Sin embargo hay una parte de la historia que se les olvida a los separatistas, ya sea por ignorancia o de manera premeditada. Companys no era ningún santo, para muestra este documento donde firma la sentencia de muerte de dos personas, algo que a Forcadell se le olvida.