El actual contrato se encuentra en el segundo año de la prórroga y es el momento idóneo para que se adopten las medidas políticas para poner fín a la lacra económica que está suponiendo el incumplimiento consentido del pliego de condiciones del servicio de parques y jardines.
La actual plantilla dicta mucho de alcanzar los 103 operarios diarios en el servicio conforme a lo establecido en el contrato y en consecuencia la arboleda, los parques y jardines de la ciudad se vienen resintiendo mientras que la máquina de generar dividendos millonarios para Talher no se detiene. Se hace preciso recordar que el presupuesto anual ronda los cinco millones de euros anuales y que Talher usa vehículos pertenecientes al erario público para prestar el servicio.
La falta de plantilla que viene siendo consentida por la Ciudad autónoma pese a las reiteradas denuncias de CGT tiene también una vertiente sindical en cuanto a que desde el comité de empresa se viene consintiendo la perdida de puestos de trabajo y las sobrecargas motivadas por la falta de personal, algo que está influyendo directamente en el índice de absentismo provocando incapacidades temporales e incluso permanentes derivadas de los sobreesfuerzos que la plantilla se ve obligada a realizar ante la carencia de personas para completar las cuadrillas y equipos de trabajo.
El 23 de noviembre, CGT escenificará su particular Blak friday aunque sea jueves, denunciando el negocio millonario de Talher, que lejos de provocar un viernes negro lleva muchos años enteros en números en negro, sumando dividendos y convirtiendo el servicio de parques y jardines de Melilla en el mejor de sus negocios ante la pasividad de la Administración y la connivencia de quienes dicen representar a las personas trabajadoras.
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