Son ya 900 hectáreas sepultadas por la lava y más de 2.000 las edificaciones que han desaparecido, dejando a más de 7.000 personas evacuadas, muchas de ellas son hogar.
Además de viviendas, el volcán se ha llevado explotaciones agrícolas, comercios y restaurantes.
Ayer domingo se rompía de nuevo el cono principal trayendo una nueva colada sdemás de un abertura bajo el cono secundario del que mana abundante lava mucho más líquida.
Esta pasada noche se han incrementado también el número de terremotos.
Pero además del aumento de la sisminicidad han aumentado también las explosiones. Ello ha provocado la apertura del nuevo boquete en el cono del volcán.
Preocupa la colada cuyo frente se detuvo en el barrio de La Laguna. En las últimas horas está recibiendo aporte de lava en su parte trasera.
Lo mejor que puede suceder es que acabe avanzando hacia el mar.