Pablo Casado no se ha sorprendido porque el presidente del PP de Gipuzkoa y portavoz en el Parlamento Vasco, Borja Sémper, haya decidido abandonar la política, para el presidente del PP era algo esperado desde que Sémper se mostrara publicamente contrario a la politica de connivencia del PP con Vox auspiciado por Pablo Casado.
Sémper renunciará a todos sus cargos públicos y orgánicos.
Desde el PP de Guipuzcoa aseguran que Sémper explicará sus motivos en una rueda de prensa que ha convocado para hoy martes al mediodía en la sede del PP de San Sebastián, pero también que el propio Casado ha hablado con él para pedirle que mida sus palabras y no eche más leña al fuego argumentando que se ha ido del partido por el acercamiento del PP a la ultraderecha.
Durante el congreso del PP en julio de 2018, Sémper se llevó con él a toda la dirección del partido en Euskadi para apoyar la candidatura Soraya Saénz de Santamaría que ganó en una primera vuelta con el voto de los militantes y luego fue derrotada por los dirigentes populares que eligieron a Pablo Casado.
Desde entonces su distanciamiento entre Casado y Sémper se hizo más que evidente por los numerosos encontronazos públicos que han protagonizado como el surgido cuando la Ejecutiva del PP impuso la candidatura de Íñigo Arcauz en las elecciones generales.
Sémper, mucho más moderado que Casado también las tuvo con la portavoz del PP en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, cuando esta criticó la "tibieza" de los populares vascos respecto al nacionalismo.
Su respuesta no se hizo esperar: "A nosotros nos ha costado sangre, sudor y lágrimas defender la Constitución y una idea de la España plural en el País Vasco y probablemente mientras algunas caminaban cómodamente sobre mullidas moquetas nosotros nos jugábamos la vida defendiendo aquí la Constitución y la convivencia".
Para unos como Teodoro Ejea la marcha de Borja Sémper da un respiro a Casado, aunque para otros se trata de un enorme problema por el efecto dominó que pueda traer.