Acaba de conmemorarse el Día internacional de la Poesía. Lo mío no son los poemas, me inclino más por el relato corto y los cuentos infantiles, pero alguien muy especial me invita una y otra vez a intentarlo y por eso, mi aportación de hoy va por ella.
Anochece
Y con cada paso que doy,
el azul oscuro de la noche se hace intenso.
Apenas queda gente en la calle,
Las salidas con amigos acaban a las diez
No me importa.
El aire frío del norte se introduce en mi garganta
Y espero ansiosa el momento de llegar a casa.
Unos geranios henchidos de rojo, me sonríen
Y, tratando de aligerar el paso, los saludo.
Apenas puedo caminar.
El día se ha hecho largo,
el dolor me paraliza,
camino despacio, tan despacio.
Espera.
Que mi lentitud no sea tu lastre.
Llegaré a tiempo
y, tan pronto alcance la puerta del hogar,
me dejaré envolver
por el caluroso abrazo de una taza de café.