La Fiscalía pedirá prisión para Trapero, Laplana , Sánchez y Cuixart

Hoy Lunes la Fiscalía pedirá a la juez Carmen Lamela, adoptar medidas cautelares para el major de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluis Trapero y Laplana y para los presidentes de ANC y Òmnium Cultural Jordi Sánchez y Jordi Cuixart después de que estos declaren en la Audiencia Nacional.

Dichas medidas que pueden ir desde la prisión incondicional a la prisión con una fianza así como a la retirada del pasaporte y la prohibición de salir del país.

Si finalmente la juez decide ingresar a alguno de ellos en prisión preventiva es por entender que pueda haber riesgo de fuga, destrucción de pruebas o por la reiteración delictiva que Sánchez Y Cuixart vienen llevando a cabo, alentando a las masas a seguir saliendo a la calle. Recordemos que los tres están siendo investigados por delitos de sedición que conllevan penas de entre 8 y 15 años de reclusión.

Gran importancia tendrá lo que diga el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, quién debe contestar al Gobierno este mismo lunes antes de las 10 de la mañana, hora en la que comienza la declaración de Trapero, Sánchez, Cuixart y la intendente de los Mossos, también investigada, Teresa Laplana, al requerimiento realizado por el Gobierno central sobre si ha declarado o no, la independencia. Su respuesta es de gran importancia entre otras cosas para saber si entre los planes del Gobierno catalán se encuentra continuar con el desafío independentista o si por el contrario la suspensión de su proyecto será definitiva.

No obstante para el Ministerio Físcal el papel de Sánchez y Cuixart es, "harto provocador y delictivo" ya que desde sus plataformas han promovido las actuaciones para conseguir la proclamación de la independencia. Las dos asociaciones promovieron según la Guardia Civil las concentraciones contra ellos y contra la policía, muy especialmente los pasados 20 y 21 de septiembre cuando varios coches de la Guardia Civil fueron destrozados, acusándoles éstos de estar detrás de las movilizaciones ciudadanas llevadas a cabo para el referéndum del 1 de octubre.

A ello hay que añadir que fue Jordi Sánchez el que pidió públicamente a Puigdemont, tras el Pleno del Parlament, que levantara la suspensión anunciada y que proclamase la independencia. Ante estos signos, para los investigadores es evidente que por lo menos en su caso, pretende continuar con actos sediciosos hasta conseguir sus objetivos, en contra de la ley, la Constitución y las varias resoluciones del Tribunal Constitucional que Sánchez viene saltándose.

En el caso de Trapero, se le considera parte esencial de la hoja de ruta diseñada para lograr la independencia. La Guardia Civil le señala como “brazo ejecutor” del plan diseñado por el Govern. Asín el máximo responsable policial de los Mossos d’Esquadra, es según la Benemérita el responsable de que sus agentes no cumplieran las órdenes del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya de impedir que se abrieran los centros de votación el 1 de octubre y se incautaran de las urnas.

Según la Guardia Civil, la inacción de Trapero es más que evidente ya que han sido numerosas las veces que los agentes catalanes han mirado para otro lado, no solo no ayudando a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, sino incluso impidiendo su actuación. Prueba de ello es la falta de protección que se ofreció a la comitiva enviada por el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona que investiga las estructuras catalanas- para realizar registros y detenciones el pasado 20 y 21 de septiembre, permitiendo que fuera creciendo el número de personas concentradas a las puertas de los edificios donde se encontraba la Guardia Civil y donde los Mossos se quedaron de brazos cruzados en vez de protegerles, tal y como recoge un informe aportado por la Guardia Civil a la Audiencia Nacional.