El proyecto de una película basado en el accidente nuclear de Palomares(Almería), sucedido el 17 de enero de 1966 cuando colisionaron dos aviones estadounidenses que maniobraban en el espacio aéreo español, estuvo a punto de acabar formando parte de la historia del cine, de la mano de Luis Buñuel.
El cineasta de Calanda (Teruel), icono del surrealismo audiovisual español, trabajó activamente en el proyecto para llevar a la gran pantalla una película basada en los hechos de Palomares. «The Bombs of Palomares» era el nombre con el que Buñuel se refirió en privado a este proyecto, que tenía como soporte el libro del mismo título que elaboró un periodista del New York Times.
De los incipientes preparativos de esa película dio cuenta Buñuel a su estrecho colaborador francés Jean-Claude Carrière. Lo hizo en la asidua correspondencia que mantuvo con el actor y guionista galo, según desvela un trabajo de Javier herrera -estudioso de Buñuel- que publica ahora la revista cultural Turia, editada por la Diputación de Teruel.
La carta en cuestión está fechada en julio de 1967. En ella, Buñuel informa a Carrière que productores británicos le habían hecho llegar una oferta para adaptar al cine ese relato del periodista del New York Times. Buñuel no oculta el interés que le ha despertado la oferta: «Se trata de un reportaje admirable: un volumen de un periodista del New York Times cuyo título es 'The bombs of Palomares'… El tema del film es de los [más] maravillosos de nuestra época. Por supuesto, si saliera, haríamos nosotros el guión juntos y después yo cogería a un miserable 'ghost writer' inglés para anglosajonizar nuestro alumbramiento», dejó escrito Buñuel en esa misiva a Carrière.
En la siguiente carta, del 10 de agosto, le confirma que tiene vía libre para escribir y realizar «Las bombas de Palomares». Sin embargo, el proyecto acabó frustrado. «Las bombas de Palomares» quedó como película frustrada en la obra de Buñuel.
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