Un sector de los Mossos d'Esquadra no está conforme con las nuevas disposiciones en el cuerpo tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Según el medio separatista Vilaweb, se organizaron "para resistir el 155" y difunden consignas contra el Estado y su nuevo jefe, Ferran López, que tienen un amplio seguimiento en las comisarías.

A través de pasquines y correos electrónicos, este grupo "clandestino" de policías regionales, denominado "Guilleries", "lidera la respuesta pública al golpe de Estado amparado por el artículo 155 dentro del cuerpo de los Mossos d'Esquadra", afirma el diario, un referente digital de la causa separatista.

En sus primeros comunicados, calificaban la intervención del Ministerio de Interior de "implacable asedio al amparo del artículo 155, de aplicación inconstitucional y antidemocrática", censuraban la destitución de Trapero y mostraban su preocupación por la oleada de citaciones a agentes del cuerpo para ir a declarar a la División de Asuntos Internos (DAI) en relación con su actuación en el referéndum del 1-O, en el marco de unos vídeos aportados por la Guardia Civil".

En una de esas notas repartidas en las comisarías, acusaban de complicidad con el Estado a los sindicatos: "Esperemos que los sindicatos mayoritarios denuncien de una vez por todas esta persecución que padece nuestro cuerpo por parte de todos los poderes del Estado y salgan de este silencio cómplice cuando no abierta colaboración". También lanzaban proclamas sobre la defensa de las instituciones catalanas y exigían "la libertad de nuestros presos políticos".

El fallecimiento del Fiscal General del Estado, José Manuel Maza, dio pie a un singular comunicado de este grupo con invectivas contra Maza y el nuevo superior de los Mossos, Ferran López: "La reciente muerte del Fiscal General del Estado ha comportado ver a nuestro ilegítimo jefe del cuero, el comisario Ferran López, asistiendo a la ceremonia donde se rendía tributo a este personaje que ha sido el estilete del Gobierno del PP para atacar judicialmente al Gobierno legítimo de la Generalidad de Cataluña, a nuestro parlamento, representantes de la sociedad civil y otros conciudadanos. Su presencia en ese acto la valoramos como una vergüenza y un deshonor para nuestro cuerpo. ¿Era necesario, comisario López? ¿O es el precio que se debe pagar para ocupar el cargo de máxima autoridad del cuerpo?".

También pidieron el voto para las candidaturas separatistas con el argumento de "restituir la dignidad del cuerpo". Decía la nota: "El cuerpo de Mossos d'Esquadra es una estructura de Estado clave. En consecuencia, ante persecuciones, ataques, difamaciones y falsedades, animamos a los compañeros y compañeras del cuerpo a utilizar su voto para rechazar las opciones políticas que nos quieren como una policía de segunda categoría, preservando así la dignidad de nuestra policía, votando una candidatura que defienda los intereses de nuestra institución, que no son otros que los de preservar los valores de la democracia y la garantía de los derechos y libertades de nuestros conciudadanos".

El último comunicado data del 27 de diciembre y se hace una valoración de los resultados electorales en la que se insta a la reposición del gobierno de Puigdemont y la implantación de la república: "Esperamos que bien pronto se pueda conformar un gobierno de restitución, conjurado para implementar efectivamente la República, y que puedan resultar investidos todos los candidatos que han sido elegidos, recibiendo el apoyo de aquellos que consideramos injusta la acción represora de un Estado en el que sus máximos órganos judiciales confunden las manifestaciones, reivindicaciones y expresiones democráticas con delitos de sedición, rebelión e incitación al odio".

Y añaden: "El cuerpo de Mossos d'Esquadra, que está sufriendo un asedio constante, conoce la importancia de estos resultados y exige la restitución del mayor Trapero al frente de la dirección de los Mossos d'Esquadra como primer paso para reparar los agravios infligidos a nuestra institución policial".