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Joan Pujol i Prat, el párroco de San Feliu de Guixols (Gerona), cura independentista está en el centro de la polémica tras expulsar de por vida de su iglesia a los feligreses no independentistas. Tales son sus soflamas que se dedica a sustituir todas sus homilías por discursos en los que narra las ventajas de vivir separados del resto de españoles.
El párroco afirma que los exconsellers que han sido detenidos por los delitos de rebelión, sedición y malversación de caudales públicos son "hombres y mujeres que no han hecho nada más que ser fieles y coherentes" y pide que su oración "sea por estos hombres y mujeres que son el gobierno legitimo de los catalanes".
El 7 de noviembre de 2017 en sus misas, el cura hizo alarde de "conocimientos jurídicos" hasta el punto de atreverse a criticar a la justicia española y hasta a la jueza Carmen Lamela.
Además, la polémica ha sido aún mayor cuando muchos de los parroquianos han decidido quejarse al propio párroco de su postura y les ha expulsado e incluso decirles que tienen vetada la entrada al templo durante el resto de su vida.
¿Ante esto que dice el Vaticano? Por el momento nada. No es de extrañar ya que tampoco se ha pronunciado la Conferencia Episcopal.
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