Que la formación morada vuelve a atravesar por un momento de profunda división es palpable. La errática postura de su lider en el conflicto catalán situando a su formación más como un partido independentista que de corte nacional hizo que alzaran la voz personas importantes dentro de la formación como Carolina Bescansa, que rápidamente como sucediera con Iñigo Errejón, fue apartada de los puestos de decisión. Sin embargo tras el rapapolvo de Bescansa al que se unieron, tantos más, Pablo Iglesias auspiciador del independentismo, recapacitó y cambiando de postura, traicionó a su valedor en Cataluña, Albano Dante Fachin.

Dante Fachín puede darse por muerto después de airear las verguenzas de Iglesias y plantarle cara. Ahora la cúpula de Podemos o dicho de otro modo Pablo Iglesias ha convocado una consulta para que sea la militancia quien decida como concurre el partido a las elecciones del próximo 21 de diciembre además de eliminar al lider de Podemos en Cataluña, al que Iglesias purgará.

Sin embargo, no es este el único problema al que se enfrenta la formación. A nivel nacional parece que el apoyo de ciertos sectores del partido al independentismo y los guiños que incluso se han llevado a cabo desde el Congreso de los Diputados hacia los separatistas ha hecho mella en el electorado. Tanto es así que, desde que se celebró el referéndum ilegal el pasado 1 de octubre los sondeos han detectado una caída en el apoyo e incluso el ‘sorpasso’ de Ciudadanos a la formación morada.

El panorama empieza a ser desolador, tanto es así que la última encuesta de Sigma Dos publicada esta misma semana daba a Podemos el peor resultado de su historia con un 15,3% de los votos, aunque desde la publicación de la encuesta hasta hoy los datos apuntan, que sigue bajando en intención de voto mientras que Ciudadanos PSOE siguen su escalada y el PP se mantiene aunque con una ligera caída.
La CUP, ya le ha lanzado un guiño a Dante Fachín, que una vez fuera de Podemos, no dudará en aliarse y aliar a los suyos a los secesionistas, menguando más las aspiraciones de la formación morada. A ello habra que unir a gran parte de la militancia de IU que no vio con buenos ojos aquella unión que Alberto Garzón llevase a cabo integrándose en Podemos, muchos de los cuales se empiezan a distanciar de la formación morada.