El cráneo humano encontrado en una caja en Castro Urdiales (Cantabria) no desprendía olor porque había sido hervido y envuelto en papel de plata.
Meses atrás la presunta asesina, le entregó la caja con la cabeza en su interior a una vecina. El argumento utilizado fue que contenía juguetes eróticos que, por pudor, no quería que la Guardia Civil viera cuando registrara su casa al investigar la desaparición de su pareja.
Según los investigadores la misma puede pertenecer a la pareja sentimental de la detenida que lleva desaparecidadesde abril.
La mujer ya ha sido detenida y este martes ha pasado a disposición judicial.
Pero aunque se dijo que la había abierto porque olia, no parece que sea cierto y que la abrió movida por la curiosidad.