Todo comenzó cuando al alcalde se le fue al garete, el colocar a dedo en la piscina municipal y como socorrista, a la hermana de su concejal de cultura.
Antonio Ramón Salas Rodriguez, hombre de los de ordeno y mando, había propuesto abrir la piscina municipal el día uno de este mes. Hasta aquí todo bien. Lo que no parece que estuviera tan bien es la decisión de colocar en el puesto de socorrista y a dedo a alguien de su cuerda, sin convocar concurso público y sin dar la oportunidad a otros jovenes que no tienen la suerte de ser hijo o hermana de...
El grupo socialista a darse cuenta del agravio y ver que el puesto ya había sido asignado a dedo sin que se conociesen las bases y se llevara a efecto el concurso,exigió al alcalde que cumpliera la ley. Pero el alcalde que ya había asignado el puesto de antemano a la hermana de la concejal de cultura y festejos se ha enrabietado y ha decidido que por contrariarlo, el que quiera bañarse que se duche en su casa y ello porque desde el grupo socialista de Alcóntar solicitaron por escrito, como es su obligación, las bases para la concesión del trabajo al objeto de que haya igualdad para los aspirantes.