Pero después de la bronca en Andalucía una vez que la ultraderecha representada por Vox hiciera público ayer que ha recibido una lista con información de los trabajadores de las unidades contra la violencia de género de la Junta que le facilitó con nocurnidad , premeditación y alevosia los de Ciudadanos, llega la indignación.
Marín se escusa de su infame proceder diciendo que el listado no contiene los nombres o apellidos de los profesionales, pero sí datos acerca de la colegiación de los 75 psicólogos y trabajadores sociales de estos servicios contra los que Vox ya ha empezado la "caza de brujas" CONDICIONÁNDOLOS al a menazarlos ya con el despido.
El expediente recoge que está colegiado el 60% de la plantilla y agarrado a esa cifra, Vox ha demandado a la Junta de Juanma Moreno que despida al 40% restante.
¿Se atreverá el presidente andaluz?
PSOE y Adelante Andalucía y UGT consideran un atentado a las víctimas que el ejecutivo haya entregado esta información ante lo que el vicepresidente del Gobierno, Juan Marín, ha recordado después de lanzar la piedra, al ver su mal proceder que no estar inscrito en un colegio profesional no significa no contar con la formación adecuada, ni inhabilita para ejercer la actividad profesional. Es, en todo caso, una opción personal y voluntaria. Estoes algo que Vox el grupo que les permite gobernar, no comparte.
Queda por ver hasta dónde son capaces de llegar los de Vox y hasta dónde el gobierno de la Junta se lo permite.