Según ha informado la Policía sueca, en un tiroteo ocurrido en una escuela de Örebro, al oeste de Estocolmo, han muerto al menos diez personas y varias más han resultado heridas. La situación continúa siendo confusa y el operativo sigue en marcha. La Policía también ha afirmado que se ha descartado cualquier intención terrorista detrás del tiroteo.
El jefe del distrito policial en Örebro, el policía Roberto Eid Forest, ha indicado que el autor del crimen no había sido identificado anteriormente por las autoridades y que se considera que actuó de manera aislada. Sin embargo, no se descarta la posibilidad de que existan otros implicados relacionados con el incidente. Asimismo, la Policía ha declarado que "no hay ningún peligro por delante".
Recibido un aviso después de las 12.30 hora local (11.30 GMT), la Policía sueca se refiere a delitos de intento de asesinato, incendio y graves infracciones relacionadas con armas. Según la Policía, un número indeterminado de alumnos y profesores se encuentra encerrado en el recinto como medida de protección hasta que culmine el operativo.
Un punto de información ha sido habilitado por las autoridades para familias y allegados, quienes han recomendado a la población mantenerse alejada del centro educativo. Además, se ha ordenado a los estudiantes de escuelas cercanas que permanezcan en sus instalaciones como medida de precaución. En el lugar donde ocurrieron los hechos, se encuentran desplegadas ambulancias, agentes de Policía y efectivos de los servicios de emergencia.
Cuatro de las cinco personas hospitalizadas han sido sometidas a cirugía: dos se encuentran estables, una presenta heridas graves y otra tiene lesiones leves. En la comparecencia, Forest enfatizó que el operativo continúa en curso y que la situación aún no está "clara", además de rechazar cualquier especulación sobre los motivos del autor o la posible participación de más individuos.
Varios centros educativos cercanos han comenzado a ser evacuados por la Policía, donde se había mantenido a profesores y alumnos como parte de una medida preventiva. A pesar de esto, el cordón de seguridad en la zona sigue activo. Las autoridades han puntualizado que, a diferencia de lo que habían comunicado algunos tabloides, no ha habido agentes heridos.
La emisora pública Radio de Suecia reportó que las urgencias y la unidad de cuidados intensivos del hospital de Örebro han sido desocupadas para poder atender a los heridos. En cuanto a la escuela Campus Risbergska, un centro educativo para adultos, Lena Warenmark, una de las docentes, comentó a la televisión pública SVT que en el momento del tiroteo había una menor cantidad de alumnos en el recinto, ya que muchos habían regresado a casa después de terminar sus exámenes.