Ya sea amenza o advertencia, el Gobierno de Sánchez lo tiene muy claro en cuanto a las medidas a tomar si ayuso no coje el toro por los cuernos y ataja con contundencia la crisis sanitaria que vive la Comunidad de Madrid.
Illa se ha mostrado dispuesto a tomar el control de la Comunidad de Madrid si Isabel Díaz Ayuso no pone medidas más contundentes para frenar la pandemia.
"Estamos trabajando ya en ello" ha dicho el ministro de Sanidad al ser preguntado en rueda de prensa aunque por el momento no ha concretado nada sobre la posible intervención.
"Es tiempo de actuar con determinación para tomar el control de la pandemia en Madrid", ha repetido varias veces.
La orden del Ejecutivo a Ayuso es clara: Es necesario el confinamiento a toda la capital y de otras localidades .
"En este estadio corresponde a la Comunidad de Madrid tomar decisiones y veremos cómo evolucionan las cosas" ha advertido Illa abriendo la posibilidad de la intervención si Ayuso sigue en los reinos de babia y no actúa como quiere Íñigo Errejón que ha calificado la gestión de la presidenta madrileña así: "La situación en Madrid es un desastre. Ayuso tiene que dimitir y el Gobierno tiene que intervenir"
Sin embargo y por lo que parece el Gobierno empieza a estar cansado de esta situación y no está dispuesto a que Ayuso siga dilatando en el tiempo las medidas a tomar: "Deben actuar con determinación, tomar el control para doblegar la curva. Para ello, deben revisar su posición y basarse, como nuestras recomendaciones, en criterios científicos. No se trata de hacernos caso a nosotros porque sí, sino a los técnicos", han dicho a la presidenta Ayuso.
La situación política en el Gobierno de la Comunidad de Madrid y la tensión por el descontrol que se vive es tal que ya ha dejado ver la primera víctima. Se trata de la dimisión del que hasta ahora era portavoz del llamado 'Grupo Covid-19', Emilio Bouza, experto en microbiología y enfermedades infecciosas que en una carta ha lamentado el choque de trenes que se ha vivido a razón de la gestión de la pandemia en Madrid.
"Las circunstancias presenciadas estos días me obligan a renunciar" se ha justificado, para despues lanzar un dardo a quienes le nombraron: "Recordarán que ustedes me afirmaron su voluntad de concordia política y su impulso para trabajar unidos para buscar una solución al problema. Creí en lo que se prometía y, tras unas horas de reflexión, acepté. Las circunstancias que he presenciado en los dos días siguientes, junto con la contemplación de las ruedas de prensa simultáneas del viernes 25, me obligan a renunciar y a declinar el ofrecimiento. He podido comprender que ese no es mi puesto en las actuales circunstancias".
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