nuevodiario.es

IRÁN Y OTAN por el General de Brigada del Ejército del Aire, Federico Yaniz Velasco

IRÁN Y OTAN por el General de Brigada del Ejército del Aire, Federico Yaniz Velasco
domingo 22 de marzo de 2020, 10:54h
IRÁN Y OTAN por el General de Brigada del Ejército del Aire, Federico Yaniz Velasco
La postura de la OTAN hacia Irán ha evolucionado muy poco en los últimos diez años, estando siempre centrada en la preocupación por el posible acceso de ese país al armamento nuclear. Como referencia de la posición de la Alianza con respecto a Irán, se recoge la contestación el 4 de marzo de 2010 del entones SG de la OTAN Rasmussen, a una pregunta sobre la política aliada en el campo de la no proliferación nuclear: “Permítanme subrayar que la OTAN no está involucrada en la cuestión de Irán. …. Instamos a los dirigentes iraníes a cumplir las obligaciones internacionales de Irán; detengan el enriquecimiento de uranio. Sin embargo, si finalmente, Irán adquiere una capacidad nuclear, entonces, por supuesto, es un asunto de gran preocupación para la OTAN. Y eventualmente también podría constituir una amenaza para los aliados.”
IRÁN Y OTAN por el General de Brigada del Ejército del Aire, Federico Yaniz Velasco

Para seguir la evolución de la postura aliada hacía Irán, se presentan a continuación los puntos relevantes de las declaraciones publicadas tras las reuniones del Consejo del Atlántico Norte (CAN) en sesión de jefes de Estado y de Gobierno. Desde 2009 se han celebrado cinco de esas reuniones conocidas como cumbres en: Lisboa, Chicago, Gales, Varsovia y Bruselas. Además, el año 2019 se celebró en Londres una llamada “reunión de líderes.”

En el punto 33 de la Declaración de la Cumbre de Lisboa publicada el 20 de noviembre de 2010 se recoge la postura oficial de la OTAN en aquel momento: “Seguimos preocupados por la proliferación de las armas de destrucción masiva. Recordamos nuestra Declaración de la Cumbre de Estrasburgo/Kehl (4 de abril de 2009) y la gran preocupación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) con el programa nuclear de Irán e instamos a que cumpla plenamente y sin demora con todas las Resoluciones del CSNU pertinentes. En este contexto, acogemos con beneplácito la reanudación de las conversaciones entre el P5+1 más Irán.[1]”

En la Declaración de Chicago de 20 de mayo de 2012 se expresa de nuevo en el punto 50 la posición de la OTAN en relación con Irán que no presenta variación significativa con la de la anterior: “Compartimos la grave preocupación del CSNU con el programa nuclear de Irán e instamos a Irán a que cumpla plenamente todas sus obligaciones internacionales, incluidas todas las Resoluciones pertinentes del CSNU y de la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Exhortamos además a Irán a que coopere con la comunidad internacional para generar confianza en el carácter exclusivamente pacífico de su programa nuclear en cumplimiento de sus obligaciones en el Tratado de No proliferación nuclear (TNP). Apoyamos la resolución inmediata de la cuestión nuclear iraní por medios diplomáticos y fomentamos un proceso sostenido de participación en las conversaciones P5+1 e Irán.”

Siguiendo la ruta de las cumbres, en la Declaración de la Cumbre de Gales de 5 de septiembre de 2014 se insiste en el punto 76 en las mismas ideas: “Pedimos a Irán que aproveche la oportunidad de la prórroga del Plan de Acción Conjunto[2] hasta el 24 de noviembre de 2014 para tomar las decisiones estratégicas que restauren la confianza en el carácter exclusivamente pacífico del programa nuclear de Irán. Seguimos pidiendo a Irán que cumpla plenamente todas sus obligaciones internacionales, incluidas todas las resoluciones pertinentes del CSNU y de la Junta de Gobernadores del OIEA. Subrayamos también la importancia de la cooperación de Irán con el OIEA para resolver todas las cuestiones pendientes, en particular las relacionadas con las posibles dimensiones militares de su programa nuclear.”

El Comunicado publicado el 9 de julio de 2016 tras la Cumbre de la OTAN celebrada en Varsovia, señalaba en su punto 68 que: “Encomiamos la conclusión del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) entre el E3/UE+3[3] más Irán, firmado el 14 de julio de 2015, y su aplicación en curso desde el 16 de enero de 2016. Subrayamos también la importancia de que Irán coopere plenamente con el OIEA en la aplicación del PAIC. Sin embargo, seguimos seriamente preocupados por el desarrollo del programa de misiles balísticos de Irán y por las continuas pruebas de misiles que son incompatibles con la Resolución del CSNU 2231.”

La Declaración publicada el 11 de julio de 2018 con ocasión de la Cumbre de Bruselas, es la última declaración tras una reunión al más alto nivel aliado en que se menciona a Irán. En el punto 49 de la Declaración de Bruselas se señala: “Nos preocupan la intensificación de la pruebas de misiles por Irán y el alcance y la precisión de sus misiles balísticos, así como por las actividades desestabilizadoras de Irán en Oriente Medio. Pedimos a Irán que se abstenga de todas las actividades que sean incompatibles con la RCSNU 2231, incluidos todos los anexos. Nos comprometemos a garantizar permanentemente que el programa nuclear de Irán siga siendo pacífico, en consonancia con sus obligaciones y compromisos internacionales de no buscar, desarrollar o adquirir nunca armamento nuclear. Subrayamos la importancia de que Irán siga cooperando plenamente de manera oportuna con el OIEA. Condenamos todo apoyo financiero al terrorismo, incluido el apoyo de Irán a una variedad de actores armados no estatales. También hacemos un llamamiento a Irán para que desempeñe un papel constructivo contribuyendo a los esfuerzos para luchar contra el terrorismo y a llegar a alcanzar soluciones políticas, la reconciliación y la paz en la región.”

Epílogo

A lo largo de los diez años transcurridos desde 2010, se ha observado una preocupación continua de la OTAN sobre el carácter exclusivamente pacífico del programa nuclear de Irán. Además, en todas las declaraciones se insiste en que Irán debe cumplir con sus obligaciones en el Tratado de no proliferación nuclear (TNP) y en que siga cooperando con el OIEA. En la Declaración de Bruselas de 2018 se expresa también la preocupación por la intensificación de la pruebas de misiles y por su alcance y precisión, así como por las actividades desestabilizadoras de Irán en la región del Oriente Medio.

La retirada en mayo de 2018 de los Estados Unidos del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) no ha sido seguida por los otros países aliados firmantes del acuerdo. En su intervención en el Foro Económico Mundial el 23 de enero de 2020, el SG Stoltenberg reconoció esa circunstancia: “… por supuesto, hay diferencias entre los aliados de la OTAN. Vemos serias diferencias en temas serios, como el comercio, el cambio climático, el acuerdo nuclear con Irán y muchos otros temas. … No hay manera de negarlo. Pero hemos tenido serias diferencias antes. La crisis de Suez en la década de 1950, o la guerra de Irak en 2003 y muchos otros.” El SG terminó su intervención diciendo: “… la fuerza de la OTAN es que siempre hemos sido capaces de superar estas diferencias, estar unidos en torno a nuestra tarea principal: protegernos y defendernos unos a otros... Y mientras eso sea creíble, no habrá ningún ataque contra ningún aliado de la OTAN, porque somos, con mucho, la alianza más fuerte del mundo, la potencia militar más fuerte del mundo.”

[1] P5 +1 designa a los 5 países miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido y Francia) más Alemania.

[2] Un acuerdo inicial firmado en noviembre de 2013 entre Irán y los países del P5+1

[3] Francia, Reino Unido, Alemania y la UE + Estados Unidos, Rusia y China

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios