Comparar aquellas purgas con asesinatos de por medio con las que Pablo Iglesias ha llevado y viene llevando a cabo en su partido no es equiparable, pero si es similar la manera de actuar que ha llevado a cabo Pablo Iglesias eliminando paso a paso y uno tras otro a todos aquellos salidos del movimiento 15 M que formaron este partido político que hoy conocemos como Podemos y que podían hacerle sombra.
Dicho de modo empresarial, Iglesias se ha cargado la competencia que le suponía compartir el liderato de una formación con muchas voces, donde él se ha propuesto consolidarse como el único solista.
En esa larga lista de apartados estaba Miguel Vila, "víctima de una purga interna".
Vila fue diputado de Podemos hasta que cayó en desgracia al discrepar con Pablo Iglesias que no solo le impidió seguir con su carrera política sino que le despidió de su puesto de trabajo ya que Vila era además trabajador de Podemos.
La cuestión es qyue Vila se quedó en la calle, mientras Iglesias, el hombre que habla del derecho del trabajador y todo ese bla, bla, bla, que repite y que resulta cansino escuchar no solo le dejó sin trabajo sino que lo largó sin derecho a paro, y todo según Vila, "por haber expresado opiniones diferentes a la línea de dirección de Podemos."
Que Pablo Iglesias dice una cosa y hace otra es evidente, que pide a los suyos alcanzar el cielo para alcanzarlo solo él, lo hemos visto. ¡Que se puede esperar del que critica y llama "casta" a los que tienen un chalet, porque él vivía en un piso y ahora lanza en jauría a los suyos cuando alguién dice que "casta" es él !
Ayer conocimos a ese Iglesias de letanias un poco más, escuchando en Hora 25 a Miguel Vila, disidente de las tesis del Mesias y un represaliado más de esa formación que día a día viene rompiendo la ilusión de aquellos que la vieron traer aire fresco a la política y que hablaba de regeneración.
La entrevista de Angels Barceló desnudó a Iglesias, sacando a la luz sus verguenzas. Todo ello después de que una jueza haya declarado nulo el despido del exdiputado de Podemos, Miguel Vila como trabajador del partido y obligue a Podemos a readmitirlo.
Ahora está por ver si Iglesias acata o no la sentencia y se muestra respetuososo con la ley, una vez que la jueza dejara claro en su sentencia que Miguel Vila, " fue represaliado por no ser afín al sector de Pablo Iglesias."
Esto es algo que corroboró ayer Miguel Vila, que dijo: " fui víctima de una purga interna." Luego explico,como le engañaron y le dijeron que no podía volver a su puesto de trabajo como técnico de imagen en el partido, alegando que había firmado una baja voluntaria, algo que según Vila es mentira, añadiendo que al despedirlo así se quedó sin derecho a prestación por desempleo.
Esto viniendo del Pablo Iglesias que dice defender los derechos de los trabajadores, no es de recibo.
"Me quedaba sin derecho a paro por haber expresado opiniones diferentes a la línea de dirección de Podemos y eso es una vulneración de derechos fundamentales en Podemos y en cualquier empresa", dejó claro Miguel Vila, uno más de la larga lista de perseguidos por alguien que pretende presidir el Gobierno de España.
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