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Alberto el padre coraje que finalmente consiguió rescatar a su hija de una secta
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Alberto el padre coraje que finalmente consiguió rescatar a su hija de una secta

viernes 06 de julio de 2018, 12:55h
La joven de Alicante de 19 años que desapareció en 2017

La historia de Patricia Aguilar comienza el día que desapareció tras su adhesión a una secta. Apareció en los medios de comunicación gracias a SOS Desaparecidos.

Alberto, su padre , no se dejó vencer y no paró de moverse cerrando entrevistas tanto en España como en Perú buscándola. A partir de ahí comenzaron a recibir llamadas de gente que creía haber visto a la joven por medio mundo. En una ocasión, les telefonearon diciendo que Patricia estaba en el aeropuerto de Santiago de Chile en unas condiciones deplorables, visiblemente drogada y en mal estado. Los informantes, que viajaban en el mismo vuelo que la chica, incluso les enviaron fotos. Comprobaron que era ella.

El día que Patricia desapareció Alberto llamó a su hija y esta le respondió que estaba en la casa de campo de unos amigos y que dormiría allí esa noche. A la mañana siguiente, se dio cuenta de que faltaba dinero en casa. Le dijo a su padre que volvería cuando realidad se encontraba viajando en tren hacia Murcia. Allí cogió un taxi y fue a un hotel. Al día siguiente, cogió el tren de vuelta, fue a casa de su abuela a escondidas y cogió las maletas que había guardado allí previamente y con las que viajó al aeropuerto de Alicante para tomar un un vuelo a Madrid y posteriormente otro desde Barajas hasta Lima, donde aterrizó el 9 de enero.

Encontraron notasm y un formulario de matrimonio en Perú además de mucha documentación sobre la secta Gnosis. Recopilaron todo y lo adjuntaron a la denuncia que interpusieron ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Elche, que empezó a investigar tanto la desaparición de la joven como al propio clan religioso filosófico que supuestamente estaba reteniendo a la chica, según relata la abogada de SOS Desaparecidos Maite Rojas.

Patricia estaba conviviendo con Steven Manrique, el líder de una de las ramas de Gnosis, con otras dos mujeres jóvenes y con cuatro niños pequeños. Alberto viajó a Lima a hablar con los medios y difundir la historia de su hija. Consiguió que la embajada llamara a su hija para regularizar su situación, pero Patricia no apareció. Poco antes habló por teléfono en directo durante 'El programa de Ana Rosa'. Ahí dijo que estaba bien, que se fue voluntariamente, que se llevaba mal con sus padres.

La policía peruana cursó entonces una orden de búsqueda internacional. Alberto también entró en contacto con los padres de las otras dos chicas que estaban con Manrique y siguió moviendo el caso. Poco más tarde junto a los familiares de las otras dos chicas, trató de reconstruir los pasos que habían seguido las tres víctimas.

Habló con testigos y descubrió que estos habían escuchado gritos, golpes y otros indicios de violencia. Esto permitió a la policía y a la Fiscalía peruanas iniciar un procedimiento por trata de seres humanos. Los agentes comenzaron hace dos semanas una intensa búsqueda de Patricia y las otras dos chicas por los sitios más recónditos que indicaban las pistas que iban obteniendo. Finalmente, localizaron al clan a 600 kilómetros de Lima. Allí estaba Manrique con las dos jóvenes peruanas. A 45 minutos habían dejado a Patricia sola junto a los cuatro menores y su hijo, un bebé de apenas cinco semanas que la chica había tenido a finales de mayo. Vivía en medio de la selva, en una zona frecuentada por los narcotraficantes, con los cinco niños a su cargo.

La policía peruana se trasladó hasta las dos localizaciones y ayer detuvo a Manrique y rescató a las tres mujeres y a sus hijos. Todos llegaron ayer mismo a las cuatro de la tarde, hora española, a Lima, donde esperaba el padre de Patricia. Alberto vio a su hija de lejos. Al cierre de esta edición, aún no había conseguido estar con ella, aunque esparaba hacerlo en cualquier momento.

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