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Ana Julia Quezada ideó un plan para matar a Gabriel
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Ana Julia Quezada ideó un plan para matar a Gabriel

viernes 16 de marzo de 2018, 12:05h
El auto del juez que confirma la premeditación de Ana Julia Quezada antes de presuntamente cometer el crimen

Ana Julia Quezada llevó a cabo un macabro plan criminal para asesinar presuntamente a Gabriel Cruz el pasado 27 de febrero. La acusada montó al niño en el coche bajo engaño o promesa y lo trasladó hasta la finca de Rodalquilar con la intención de acabar con su vida, según se desprende del auto dictado por el magistrado Rafael Soriano.

La autora confesa del crimen cavó un hoyo en la finca antes de llevarse a Gabriel de Las Hortichuelas y asfixió al menor con sus propias manos hasta causarle la muerte. Ana Julia sabía que estaría a solas con el menor y buscó un lugar aislado y apartado para completar su plan, según detalla el auto.

El juez instructor ve indicios incuestionables de la participación de la acusada y de una malvada voluntad dirigida a asegurar la comisión del crimen. Ana Julia desnudó el cuerpo parcialmente, lo enterró en el agujero que anteriormente había cavado y se quedó en la propiedad pintando para construir una coartada. El magistrado dictó este jueves prisión provisional comunicada y sin fianza para la autora confesa del asesinato de Gabriel.

Se le imputa los delitos de asesinato, de detención ilegal y contra la integridad moral. Por ello el juez Rafael Soriano, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Almería, dictó ayer prisión incondicional para Ana Julia Quezada, la autora confesa de la muerte del niño de ocho años Gabriel Cruz, desaparecido el 27 de febrero en Níjar (Almería). En su auto, el magistrado asegura que “se infiere una malvada voluntad dirigida especialmente a asegurar la comisión del crimen”.

Así el juez apunta que Ana Julia aprovechó un momento en el que sabía que iba a estar a solas con el niño y que su abuela no lo iba a controlar, “para mediante engaño o promesa de devolverlo prontamente a jugar con sus primos, trasladarlo hasta la finca de Rodalquilar, lugar apartado y aislado, en el cual tranquilamente poder llevar a cabo su macabro plan criminal”. Allí, prosigue el auto el relato de los hechos que se deduce de las actuaciones judiciales, la mujer mató al pequeño asfixiándolo con sus manos, le desnudó parcialmente y trasladó el cuerpo al jardín, donde “previamente había hecho un hoyo con una pala, enterrándolo a continuación”.

Quezada, pareja del padre del menor, fue detenida el domingo después de que la policía encontrase en el maletero de su coche el cadáver de Gabriel. Dos días después, la arrestada confesó que el mismo 27 de febrero mató y enterró al menor.

Quezada, quien ingresará en la prisión almeriense de El Acebuche, está imputada por delitos de asesinato, detención ilegal y contra la integridad moral, los dos primeros conforme lo que había solicitado la Fiscalía de Almería.

El juez acordó el miércoles prorrogar la detención de la mujer, de 43 años, para la práctica de nuevas diligencias. La Guardia Civil encontró después el hacha con cuyo mango supuestamente golpeó al niño antes de asfixiarle, según dijo en su confesión, en la que alegó que Gabriel había intentado antes agredirla.

El jefe de la comandancia del instituto armado de Almería, José Hernández Mosquera, y el comandante de la Unidad Central Operativa Juan Jesús Reina precisaron ayer en una conferencia de prensa que Quezada, a quien calificaron como “una persona con una frialdad máxima, posesiva, egocéntrica, un poco manipuladora”, actuó sola.

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