Intento de asalto a CGT Andalucía, Ceuta y Melilla por parte de Míguel Fadrique, secretario general de CGT Estatal.
La imposición de un congreso extraordinario por parte de Fadrique, cuyo proceso se encuentra judicializado por los múltiples incumplimientos estatutarios que han precedido a su desarrollo, desoír las recomendaciones, así como cualquier intento diálogo desde la territorial andaluza, culminó ayer en Sevilla con un bochornoso espectáculo de violación y autoproclamación de una candidatura abucheada por la mayoría de los sindicatos de CGT-A.
Fadrique ha necesitado para imponerse la manipulación de las tablas de votos y los estatutos por ser esa la única manera de cumplir con el objetivo que pretendían e intentar eliminar irregularmente al legítimo secretariado permanente de CGT-A, elegido el pasado mes de abril 2023 en Jerez con un apoyo del 95% de los votos de los sindicatos de CGT en Andalucía, Ceuta y Melilla.
Pretendía así Fadrique, usurpar la legítima representatividad territorial, imponiendo desde el aparato político a un grupo encabezado por alguien que no puede ostentar cargo de representación en CGT, dada su condición de candidata política en las últimas elecciones municipales al ayuntamiento de Sevilla, conculcándose clara y gravemente el art 31 de los estatutos, al mantenerse vigente el mandato político para el que se presentó.
El único secretariado de CGT A, válido es según los asistentes el que salió del X congreso ordinario celebrado en Jerez en primavera 2023, cuyo secretario general es Juan Antonio Guerrero Márquez al que acompañan dentro de los órganos legítimos de gestiónMiguel Montenegro como secretario de Organización, Lola Rodríguez como secretaria de acción social, Fátima Salguero como secretaria de Salud Laboral, Susana Mellado como secretaria de Formación, Miguel Ángel Gómez como secretario de Comunicación y Cristina Morones como secretaria de jurídica, por lo que no reconocemos con ninguna responsabilidad orgánica a quienes han formado parte del pucherazo del día de ayer y lamentamos profundamente que esa intromisión estatal en la vida orgánica de CGT-A pueda paralizar la normal actividad social y sindical que este grupo humano viene desarrollando en colaboración con todos los sindicatos de CGT en Andalucía, Ceuta y Melilla hasta que los tribunales de justicia pongan las cosas en su sitio.
Ahora, nos dicen "ha tocado a Andalucía tras los ataques que otros entes de CGT a nivel estatal ya han recibido por parte de Fadrique desde que accedió a la secretaría en 2022, impulsado y catapultado por quienes quieren intervenir y controlar los recursos de la organización, más movido por cuestiones de correas de transmisión políticas que por las sociales y sindicales, actuaciones estas sobre las que, al menos, ya tiene dos sentencias condenatorias de la Audiencia Nacional".
Y añaden, a partir de este momento "se avecina un periodo convulso en CGT-A hasta que se pronuncie la autoridad judicial", aun así,aclaran " seguiremos poniendo todos nuestros esfuerzo en el incuestionable compromiso de defender los intereses de toda la clase trabajadora, principal objeto de existir de un Sindicato de Clase".