En su cuenta de la red social X, el congresista Alfredo Mondragón compartió una publicación que informa sobre el descubrimiento del horno en el que los paramilitares quemaron a cientos de colombianos en territorio venezolano. El presidente Gustavo Petro también compartió esta publicación. Según el antropólogo de la UBPD, Marlon Sánchez, en ese lugar solía funcionar un trapiche que aparentemente fue utilizado como hornos crematorios por las antiguas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
En Juan Frío, Santander, cerca del río Táchira en Venezuela, la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas ha descubierto un horno utilizado por paramilitares durante el conflicto armado en Colombia.
Se han llevado a cabo excavaciones para documentar la evidencia y reconstruir los hechos ocurridos entre 2002 y 2004.
Asimismo se ha obtenido una confesión de un exlíder paramilitar que admite su responsabilidad en los asesinatos y desapariciones de cuerpos con el objetivo de evitar su contabilización por parte de las autoridades.
Juan Frío, está ubicado en el extremo norte de Santander, en el margen del río Táchira, perteneciente al estado venezolano.
Las excavaciones iniciales se han enfocado en los sitios donde solían encontrarse las llamadas 'Pailas'. Estos sitios estuvieron enterrados durante veinte años y tienen una profundidad aproximada de un metro.
La primera intervención tuvo lugar en mayo de este año y se continuará realizando estas labores con el objetivo de reconstruir los hechos ocurridos entre 2002 y 2004 en el contexto del conflicto armado colombiano.
El exlíder del Bloque Catatumbo de las AUC, en un encuentro celebrado en los hornos de Juan Frío el pasado mes de mayo, participó de manera virtual. Durante dicho encuentro, asumió su responsabilidad en los asesinatos de civiles y admitió que él fue uno de los responsables de ordenar la desaparición de los cuerpos. Según su testimonio, el propósito de estas incineraciones era evitar que la fuerza pública pudiera contabilizar a las víctimas.
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