El tramo adjudicado tiene un recorrido de 31 kilómetros entre ambos territorios y supone también enlazar con Andalucía, a través de la línea Murcia-Almería, donde las obras están bastante avanzadas. Contará con 10 viaductos, 11 pasos superiores, 17 inferiores y el túnel del Rincón de 928 metros de longitud.
Como no puede ser de otra manera el Ayuntamiento de Lorca va a prestar especial atención a la ejecución de las obras y, en especial, en cuanto a los pasos de agua de las ramblas y cauces que discurren por el término municipal de Lorca y que se cruzan con esta vía férrea o así como, también, de las expropiaciones y los procedimientos de expropiación que se están dando actualmente precisamente para la construcción de esta línea.
En palabras del Primer edil lorquino, Diego José Mateos, la importancia de esta adjudicación es un paso positivo y una muestra de que el Gobierno de España apuesta por terminar el Corredor Mediterráneo en el menor tiempo de plazo posible.
Las previsiones gubernamentales prevén concluir las actuaciones en 2026 para no perder los fondos "Next Generation".
Las actuaciones incluyen, entre otras partidas, la adecuación de las estacione de Puerto Lumbreras y Pulpí, así como la construcción de una nueva obra en Almendricos para afrontar el servicio de Cercanías en el futuro trazado férreo. Las obras comenzarán entre la travesía situada al sur del casco urbano de Lorca, hasta casi un kilómetro al sur de la actual estación pulpileña.
El proyecto contempla una vía doble para alcanzar velocidades máximas de 300 kilómetros por hora. En el final del tramo, después del cruce con la Vereda de los Charcones, la plataforma de vía doble se divide en dos de vía única. Una de ellas destinada a dar continuidad al trazado hacia Águilas y la otra que dará continuidad a la línea de alta velocidad hacia Almería.
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