La situación es cada vez más trágica.
Durante toda la tarde, un centenar de violentos ha estado lanzado sacos de harina, botellas de cristal, pelotas y adoquines contra los dispositivos de seguridad y contra la prensa.
Cuatro menores de edad, han sido detenidos después de que la policía se haya visto obligada a cargar contra los radicales independentistas asentados en Vía Laietana que comenzaban a quemar contenedores e impedir el paso de los coches de bomberos.