La región de Gaza ha alcanzado un récord histórico en cuanto a desplazados. Durante los meses de octubre a diciembre del año pasado, se reportaron 3,4 millones de desplazamientos forzosos en una población de 2,2 millones. Esto es sin duda un genocidio encubierto, una manera de ir matando a los habitantes de Gaza.
El Observatorio de Desplazamiento Interno (IDMC), la autoridad mundial encargada de analizar este fenómeno, confirma que estos números representan un nuevo récord desde que se comenzaron a llevar registros.
La ONU informó la semana pasada sobre las personas desplazadas en la ciudad gazatí de Rafah, destacando que la mayoría ha huido más de una vez. En este enclave palestino, algunos residentes ya han experimentado hasta cinco o seis desplazamientos. El informe enfatiza la frecuencia con la que estas personas se mueven en busca de seguridad y estabilidad.
Gaza ha sido un campo de concentración donde el pueblo palestino malvivía, no distinto den aquellos guetos donde los nazis enjaulaban a los judíos, antes de llevarlos a los campos de exterminio como el que es hoy Rafah.
Este martes en Gaza, Israel ha atacado una escuela de la UNRWA, un centro supuestamente protegido, donde han matado a 20 personas.
En un comunicado emitido se informa que el ejército israelí ha afirmado haber eliminado a "alrededor de 15 individuos pertenecientes a grupos terroristas" en Gaza.
Sin embargo no todos los muertos son milicianos de Hamas , la mayoría son gente inocente.
Israel lo justifica y añade :"se llevó a cabo un ataque (aéreo) utilizando municiones precisas para minimizar el daño a los civiles no involucrados". Alegando que los combatientes de Hamas operaban desde allí.
La triste realidad es que Israel ha atacado escuelas y otros edificios de la UNRWA, que sirven de refugio a los palestinos desplazados, desde el inicio de la invasión de Gaza, con el objetivo metódico de ir eliminando palestinos, ¿ acaso no es lo mismo que hicieran los nazis? En aquel entonces los paises se alzaron contra la barbarie, aunque tarde va siendo hora de hacer lo mismo.
Gabriel Sánchez