INTERNACIONAL

Se cumplen 50 años de la muerte del "Che"

Lunes 09 de octubre de 2017
Ernesto Che Guevara vive.

Aquel 9 de octubre de 1967, un grupo de militares bolivianos y de agentes de la CIA tomaron la determinación de ejecutar en La Higuera, una pequeña aldea, al guerrillero Ernesto Che Guevara, suponiendo que con su ejecución acababan con el comunismo en América Latina. Craso error, la muerte del Che avivó la revolución de los deprotegidos en America Latina y se propagó como la pólvora hasta convertir al guerrillero argentino en un mito, germen de posteriores generaciones de revolucionarios que inspirados en el ejemplo del Che ,lucharon hasta la muerte contra las dictaduras militares en sudamérica.

El Che fue capturado tras once largos meses de supervivencia en la selva, con los militares pisándole los talones, tiempo después de aquella revolución cubana donde luchó codo a codo con Fidel Castro para liberar la isla de la dictadura militar, enfrentándose al dictador Batista y a su sostenedor, el gobierno de Estados Unidos que había convertido Cuba en el puticlub de los americanos acaudalados, se propagaba por todo el continente.

Tal ha sido y es su ideario que aún hoy , cincuenta años después de su muerte, su mermoria aún pervive y deambula en la conciencia de muchos inconformistas que se enfrentan a las desigualdades y a la libertad de los pueblos frente al opresor, muestra de ello es su imagen en las camisetas con la cara del guerrillero con las que podemos ver a los jóvenes y no tan jóvenes en cualquier país del mundo, por remoto que sea, incluido el país de sus verdugos, Estados Unidos, mostrando de alguna manera su simpatía y reconocimiento por el guerrillero que puso en jaque su hegemonía y " patas arriba" las dictaduras en Sudamérica.

Lejos de lo que suponían la muerte del Che, dio vida a los revolucionarios y a las revoluciones, así su ejemplo de vida, se instaló no solo en América del Sur, también al resto de continentes y por consiguiente llegó como un soplo de aire fresco a los paises donde las libertades habían sido guillotinadas por las dictaduras militares. Su heroicidad no solo por la manera en que vivió, sino por la dignidad y heroicidad con la que murió, se convirtió en ejemplo y acicate para miles, millones de personas para las que el Ché se convirtió en un ejemplo a seguir.

Así el Che no es a día de hoy, medio siglo después de su muerte, solo un mito, es mucho más, es la consolidación de un ideario que aunque utópico es alcanzable con la unión de muchas manos enfrentándose a los fusiles. Es un no tener miedo a la muerte cuando de la defensa de las libertades se trata. La disposición que demostró a morir por la defensa de sus ideales consiguió trascender y traspasar fronteras hasta convertir al argentino en un símbolo de la libertad y de la igualdad de todos, convirtiendo su muerte en un ideario y a su su persona en un mito fuente de inspiración.

Así el Che hizo renacer al Jesus revolucionario cuya imagen crucificada es simbolo del cristianismo. La imagen plasmada en fotografias del hombre muerto tendido en la lavandería del hospital de Vallegrande, le convirtió en leyenda póstuma que toda revolución necesita para subsistir, en el acicate de lucha donde el miedo a morir queda relegado a segundo lugar, relegado por las ideas. Aquel desafío al mundo de las dictaduras en la que la desigualdad prevalecía, en beneficio de los poderosos y en perjucio del pueblo, ha sido y es un ejemplo a seguir. Hoy el Che vive, más si cabe que cuando la sangre corría por sus venas. Su imagen, es la imagen del desafío, del compromiso y de la inconformidad.

Su ejemplo está en Bolivia, país cuyo presidente es Evo Morales, allí murió el Che, en las tierras gobernadas por un indígena admirador ferviente del Che. Un ejemplo de que el testamento póstumo del Ché y su presencia sigue latiendo en el mundo de los opromidos y también en los paises que han alcanzado la libertad.

Gabriel Sánchez.