MELILLA

Qué hay detrás de la dimisión del gerente de RTVM. Las acusaciones de Isabel Moreno sacuden el Consejo de Administración

Viernes 03 de marzo de 2023

El hasta ayer gerente de RTVM, Yeray Díaz, tras conocer las manifestaciones de la diputada del PP Isabel Moreno, ha dicho a través de las redes sociales "no me marcho porque asuma ninguna acusación, todo lo contrario. Lo hago para defenderme desde fuera y en los juzgados". "Las acusaciones que se han vertido contra él son “muy graves, nunca en mi vida he acosado a ninguna persona. Nunca ha acosado a nadie, reitera, en el ámbito personal, profesional o político, ni tampoco de forma laboral, sexual o racial".



El director de Radio Televisión Melilla dimitió antes de que se le planteara un despido por las acusaciones de acoso laboral.

La diputada del PP Isabel Moreno ha afirmado que, tras la renuncia de Yeray Díaz en el Consejo, la propuesta de su partido para que dejara inmediatamente su puesto como gerente de TVM con un sueldo anual superior a 60.000 euros ya no es factible.

Isabel Moreno declaró en una entrevista que las acusaciones del PP eran correctas, ya que un estudio interno de INMUSA (la empresa de RTVM) revelaba un presunto caso de acoso laboral. Esto sugería que el señor Díaz no era la persona adecuada para ocupar un puesto público como el de gerente de Radio Televisión Melilla".

Según ha declarado, una cuarta parte de los empleados de RTVM tienen bajas laborales por problemas mentales a largo plazo. El informe muestra resultados devastadores, lo que confirma la situación crítica y tóxica en la que se encontraban.

La diputada del PP ha declarado que los despidos no deberían limitarse solo al gerente, sino también a aquellos líderes del PSOE que designaron a Yeray Díaz, como Gloria Rojas, vicepresidenta primera de la Ciudad y secretaria general del PSOE, y Elena Fernández Treviño, diputada y presidenta de INMUSA.

Díaz indicó que una de las deficiencias de Televisión Melilla era la falta de regulación para los colaboradores. Por lo tanto, él mismo se encargó de desarrollar junto al equipo jurídico de la compañía un estatuto para los colaboradores con el fin de evitar que "algunos empleados ingresen sin cumplir con los requisitos".

Dunia Amar colabora con Televisión Melilla bajo un contrato de servicios personales donde se especifica que no hay una relación laboral entre ellos. Esta es la normativa que rige su colaboración.

Según Diaz, todos los trabajos realizados por la periodista para Televisión Melilla, ya sean pagados o no, tienen un acuerdo firmado que especifica que la profesional no tiene un vínculo laboral con la empresa.

"Tengo pruebas para demostrar que no es cierto que no haya una regulación. Yo mismo cerré la posibilidad de contratar a falsos autónomos". "Dunia Amar fue elegida como colaboradora de los informativos Amazigh tras un proceso de selección en el que se presentaron más de treinta personas, y fueron elegidas cuatro por tres profesionales de la empresa; yo no tuve nada que ver con esta elección".

Los problemas comenzaron cuando Amar solicitó un puesto de redacción propio, ya que deseaba ser tratada como el resto de los redactores. Sin embargo, yo me negué a ello.

La periodista me advirtió: "O me das un programa o tendrás que lidiar con las consecuencias".