En una loma situada en la orilla derecha del rio Guadalquivir se hayan las tierras donde estuviera la mitica colonia Romana de Salaria, también llamada Ubeda la Vieja. Es en ese lugar donde los romanos se dedicaron al cultivo del olivar, en el que hoy, siguiendo la tradición, María y Pepe pusieron en marcha hace apenas cinco años un novedoso proyecto agrícola que la semana pasada obtuvo un merecido reconocimiento.
Después de muchas catas sensoriales y varios días de valoraciones, la Guía IberOleum ha publicado por fin los resultados de este 2021.
Esta ha sido una edición especial por el gran número de productores que han participado en concurso y por la alta calidad de los Aoves presentados entre los que ha destacado, obteniendo la máxima puntuación, IRENEO un zumo procedente de una explotación agrícola que desde que dos jóvenes, María y Pepe se hicieron cargo de ella apostaran por estar en perfecta armonía con la naturaleza, iniciando una andadura arriesgada como ha sido la transición de su cultivo, de convencional a Ecológico.
La finca sita cerca de Sierra Mágina y rodeada por restos de murallones, capiteles y frisos de lo que en otro tiempo fuese la rica y floreciente colonia romana de Salaria produce un zumo de aceituna dificil de superar según los expertos catadores que han tenido el placer de saborearlo y otorgarle el primer puesto.
Estos dos jóvenes agricultores que dicen sentirse "satisfechos, abrumados y agradecidos" seguramente no sean conscientes aún de su logro tras obtener una puntuación de 9,6 puntos sobre 10 y ser primeros de su categoría. IRENEO se ha convertido por méritos propios en uno de los grandes zumos de aceituna del mundo.
Pero llegar hasta el lugar de excelencia que IRENEO ocupa en este momento no ha sido fácil nos ha explicado Pepe, quien al parecer tenía muy claro cuando iniciara su sueño, lo que quería. Lo primero que hizo fue ir eliminando toda clase de productos químicos al objeto de entablar una sincera y cordial armonía con la naturaleza, que con el tiempo le ha recompensado. Así con aportes de cada una de las partes el beneficio obtenido a día de hoy es un hecho constatable como puede verse cuando se lleva a cabo la probatura del jugo y se comprueba su calidad.
En segundo lugar comenzaron a cambiar la manera de cultivar, evitando arañar la superficie de sus campos para crear así un manto vegetal que evitase la erosión y por consiguiente la desnudez de la tierra. Luego pusieron gran interes en todas las actividades relaccionadas con la poda y su picado. Me contaba Pepe "que se realiza cada dos años y siempre antes de la anidada de aves". También han dado gran importancia al abonado de la tierra que se realiza siempre con materia orgánica y no con abonos, pues "sirve además, de control de plagas y evita tener que usar insecticidas". De igual manera IRENEO utiliza como fungicida para las hojas la leche de cabra y el guano, apostando además por el agua clorofila, el extracto de algas, el té de ortiga, verdolaga o esparceta.