La detención de tres individuos en conexión con los disturbios ocurridos el 3 de noviembre, durante la visita a Paiporta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, los reyes y el president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha sido llevada a cabo por la Guardia Civil. Un vecino de Albal y otro de Godella fueron arrestados este miércoles, presuntamente involucrados en los daños causados al vehículo del presidente y al de su escolta. Ambos se encuentran a la espera de ser presentados ante la autoridad judicial.
Un hombre de 41 años fue detenido anteriormente por la Guardia Civil tras golpear con un cepillo de barrendero la luna trasera del coche de Sánchez durante los disturbios, en los que tanto él como Mazón y los monarcas sufrieron insultos, lanzamientos de objetos y agresiones en Paiporta. Este presunto agresor, que ya se encuentra en libertad provisional, es otro vecino de Albal, originario de Paiporta, y no tiene antecedentes ni conexión con grupos ultra. Según informó 'Las Provincias', en ese momento estaba realizando tareas de limpieza junto a su hermano gemelo.
Un segundo detenido ha sido puesto en libertad provisional la noche de este miércoles. El Juzgado de Instrucción 3 de Torrent recibió a esta persona, quien está acusado de presuntamente golpear el vehículo oficial del presidente en Paiporta. Aunque el juzgado ha decidido otorgarle la libertad provisional sin imponerle medidas cautelares, el arrestado sigue siendo objeto de investigación dentro de unas diligencias previas que se han abierto para esclarecer los hechos.
La identificación de más personas vinculadas a los incidentes ocurridos durante la visita continúa por parte de los investigadores del Servicio de Información de la Guardia Civil. La mañana del pasado domingo fue el momento en que se desarrollaron estos hechos en Paiporta, en la zona cero de la DANA que ha causado más de 210 muertes en Valencia. La visita de las autoridades estuvo marcada por insultos y el lanzamiento de diversos objetos, desde palos hasta bolas de lodo.
Varias personas persiguieron a Pedro Sánchez, lanzándole palos hasta que alcanzaron su coche oficial. Una vez allí, golpearon el vehículo, causando daños mientras el presidente del Gobierno se encontraba ya en su interior.