Y a los hechos me remito. Al inicio de la pandemia allá por el mes de Marzo, nuestro Presidente autonómico clamaba por tierra, mar y aire en contra de los dictadores socialcomunistas que habían impuesto un terrible “estado de alarma”, según los chicos de Casado, para quitarnos nuestras libertades más esenciales como era el poder movernos por donde nos diese la real gana. Incluso en su deriva más dictatorial llegaron a cerrarnos los bares para que con la excusa del virus no pudiéramos reunirnos para criticar a los demonios izquierdistas. Todo ello mientras clamaba que desde Madrid le estaban robando las competencias.
Todo ello, y eso es lo mas grave, sabiendo perfectamente que en aquellos momentos la única forma de acotar al virus y ralentizar su expansión era imponiendo un confinamiento casi total. Lo sabían pero no les importó criticar al Gobierno de España, pensando que eso les podría aportar algún voto. Presionaron para acabar con el Estado de Alarma con el falso argumento de que el Gobierno de España lo estaba haciendo muy mal y ellos si sabían hacerlo bien, mientras reclamaban organizar ellos la desescalada. Así se les permitió y el resultado fue un desastre.
Ahora nos encontramos en la segunda oleada de la pandemia y de nuevo vuelven a las andadas. Claman para que el Gobierno central no les quite las competencias y afirman que ellos saben como atajar el problema. Ante esto y con la dificultad añadida de sacar adelante de nuevo el Estado de Alarma a nivel nacional, ya que las derechas tratarían de impedirlo a toda costa, el Gobierno de España les ofrece la posibilidad de que cada Comunidad Autónoma en función de la situación sanitaria gestione sus competencias, eso sí con importantes ayudas económicas por parte del Estado.
Y aquí es donde viene el problema: tienen todas las competencias pero resulta que por cobardía o por ignorancia no las están ejerciendo y con ello creando un gran peligro para la salud de todos los ciudadanos. Saben perfectamente que ahora y vista la expansión de la enfermedad no queda de otra que tomar medidas, unas medidas que según las derechas, el Gobierno de España no sabía aplicar pero ellos si sabían qué hacer y cómo hacerlo.
Pues bien, en la parte que nos afecta el bicho sigue campando a sus anchas por toda la Región de Murcia sin que el Gobierno murciano haya adoptado, al menos que se sepa, ninguna medida para atajarlo. Ello, por no hablar del caos en el que han convertido el inicio del curso escolar. Nos encontramos en el comienzo y hasta el momento nadie, ni profesores, ni alumnos ni padres, y posiblemente ni siquiera los responsables de la Consejería de Educación saben cómo se van a abrir los centros educativos. Así que no entiendo para que querían las competencias en materia de sanidad y educación si son incapaces de ejercerlas
Si (
No(
