"Miserable, no tienes verguenza"

Ada Colau, no se mordió la lengua como muchos hacen cuando el de enfrente lleva una sotana y dice hablar en nombre de Dios, aunque quien le dicte el discurso sea el diablo o incluso Franco de quien este cura ultraderechistaha sigue sus preceptos. La sotana es tan solo la mascara tras la que esconde un miserable para ser algo más que un indecente. Ayer en vivo y en directo, en Espejo Público, contestó al infame Santiago Martín: "no tiene vergüenza y es un miserable". "No puedo decir nada más".

Recordemos que Santiago Martín animó sin el más mínimo pudor, durante la misa del pasado domingo, a denunciar a Colau por "colaboración" en los ataques terroristas del pasado jueves en Barcelona y lanzando estas perlas "una parte de la responsabilidad de los 15 muertos que por el momento se llevan contabilizados recae sobre Colau por haberse negado a colocar elementos disuasorios —como bolardos y grandes maceteros— en las principales calles barcelonesas: "Una parte de culpa es de la alcaldesa de Barcelona. Los culpables son los asesinos, por supuesto, pero una parte de la culpa la tiene la alcaldesa. Menos lágrimas y más hacer cosas".

Ada Colau ha dicho " no le llamo miserable porque haya hecho referencia a mi, sino porque también se ha referido a Manuela Carmena ". Razón no le falta para haber llamado a este soplagaitas, idiota. "Es evidente que los únicos responsables de esta barbaridad son aquellos que la han cometido", ha subrayado la alcaldesa de Barcelona, añadiendo que el sacerdote le ha culpado a ella porque "le cae mal". Seguramente pero a buen seguro, bastante menos, que el asco que nos produce, que imanes catolicos como este tengan acceso a un púlpito para contrariando el mensaje de Dios, ser portavoz oficial del diablo.

"Se descalifica él solo y no le debemos prestar más atención porque no se lo merece", ha zanjado.

Punto en boca, hablar más de este delincuente de la palabra, es hacerle publicidad.