El partido se jugará el 18 de marzo a las 21 horas, pero se disputará a puerta cerrada, según el acuerdo al que han llegado este martes la Generalitat y los responsables del club reunidos desde las 9 horas en la sede del Departament de Salut.
Al encuentro, inicialmente y antes de las últimas consignas del Gobierno italiano, tenían previsto acudir 5.000 seguidores de la ciudad napolitana.
Con la disputa del partido a puerta cerrada el Barça perderá alrededor de 4,5 millones de euros.