Alina de 36 años era natural de Rumanía de donde llegó a España hace dos años, inició una relación con su asesino confeso, Arthur K., un holandes de 59 años, para el que trabajaba en su inmobiliaria.
El ciudadano holandés confesó a la Guardía Civil haber asesinado a su pareja sentimental, rumana de 36, antes de arrojarla a un contenedor.
Ayer el detenido fue trasladado en un vehículo camuflado hasta la inmobiliaria de su propiedad, situada en el número 2 de la calle Madrid de Moraira, donde los agentes han llevado a cabo un registro.
Por el momento se desconoce donde se cometió el asesinato, de ahí que los investigadores no descaten que haya podido ser en el interior de la inmobiliaria.
El crimen ocurrió el pasado domingo por la noche pero se descubrió el lunes sobre las 8.00 horas cuando operarios del servicio de limpieza observaron rastros de sangre dentro de un contenedor, donde estaba la víctima degollada estaba envuelta en una colcha y vestida con ropa de calle.
Hasta el lugar se desplazó la policía judicial y agentes de la brigada científica.
La mujer presentaba heridas defensivas en los antebrazos.
El detenido contaba con antecedentes de violencia machista e, incluso, tuvo una orden de alejamiento hacia la víctima, según fuentes próximas a la investigación.
Por el momento la investigación ha sido declarada por un juzgado de Dénia,secreto de sumario.