El fabricante italiano ha sido capaz de duplicar sus ventas de coches durante el primer semestre de 2019 gracias al nuevo Lamborghini Urus. El primer «Super SUV» de la compañía ha sido clave en estos registros. Ahora, Lamborghini encara lo que resta de ejercicio para poder cerrar el año por encima de las 8.000 matriculaciones.
Sin embargo, dice Antonio Fernández en motor.es que esta buena situación por la que está pasando la marca no resta un ápice de preocupación sobre los reemplazos de sus otros dos modelos, el Lamborghini Aventador y el Lamborghini Huracán. En los últimos meses han sido numerosos los informes que han visto la luz sobre los sucesores de estos dos vehículos. En especial del Aventador. Modelo que, de cumplirse la última información que ha aparecido en escena, ha sido retrasado.
Herbert Diess, CEO del Grupo Volkswagen, pone como referencia a Ferrari en cuanto a rendimiento económico se refiere. Para que Lamborghini pueda acortar la diferencia que les separa, será clave acertar con los reemplazos del Aventador y Huracán. Lamentablemente, el retraso en el desarrollo del nuevo Aventador (o modelo que ocupe su lugar) ha sido retrasado debido a las discusiones que hay sobre su apartado mecánico.
En un primer momento se apostó por dar continuidad al motor V12, sin embargo, finalmente no será así y el Lamborghini Aventador será «otra víctima» de la electrificación. Con ello, se podrá mantener un nivel alto de prestaciones y rendimiento mientras que las emisiones y consumos se reducen considerablemente. El conjunto mecánico girará alrededor de un motor V8. También para el nuevo Lamborghini Huracán.
Cabe señalar que no se trata de la primera vez que el reemplazo del Aventador es retrasado. Hace unos cuantos meses pudimos saber que su lanzamiento pasaba de 2020 a 2022. Ahora, se va un paso más allá y se ha optado por fijar el año 2024 como el del lanzamiento del nuevo Aventador. El nuevo Huracán verá la luz un año después, así que no será una realidad hasta 2025.