A Antonio Martínez Rodríguez, hombre con suerte, le ha venido todo rodado. Su éxito se debe en parte al órdago que Luis Caparrós Mirón lanzó postulándose tiempo atrás para la secretaría general del PSOE de Almería de la que se retiró a última hora, dejando libre el camino a José Luis Sánchez Teruel. En el trueque- acuerdo- entendimiento o como le quieran llamar, entró el apadrinamiento de Antonio Martínez por parte de Sánchez Teruel.
Del paso del purchenero por la concejalía de su pueblo, tan solo reseñar que hizo poco ruido, de su hacer en las dos delegaciones, nada reseñable, es decir pasó sin pena y se fue sin gloria. Pero lo que no consiguió por méritos lo consiguió por su docilidad y capacidad de adaptación, que de casta le viene al galgo y siempre es un honor para un maestro un alumno aventajado.
La cuestión es que gracias a ese "sí guana", que el purchenero cultivó con esmero, el de Chirivel, (Sánchez Teruel) que se amamantó en Armuña del Almanzora, localidad cercana a la del susodicho, vio en él al segundón ideal, que colocado dos pasos por detrás, vigilaría su espalda, sin que la mano, dando la distancia necesaria pudiera asestarle puñalada alguna.
Así, tras eliminar a Pérez Navas, postularon a Antonio para Secretario de Organización, un puesto que tomó con entusiasmo pues llevaba aparejado ir en puestos de salida para el Parlamento Andaluz.
"El problema" entre comillas como pueden ver, vino cuando la diosa fortuna se le torció a la "Sultana Andaluza" y la dejó en la estacada, a las puertas de San Telmo, pero sin la llave de la puerta de entrada.
En la trájica pérdida de la Junta, la de Triana arrastró a muchos de los suyos y entre estos a Antonio Martínez que tras su nefasta campaña política en Almería de la que fue figura principal, se quedó compuesto, sin novia y lejos de la Sevilla de sus amores de la que Sánchez Teruel tanto le había hablado y en la que ya tenía pisito alquilado.
Pero en este PSOE de Almería siempre hay remedio para un descosido y prestos se prestaron una vez más echar una manita al muchacho, esta vez a cuenta de las cuotas de los afiliados. La cuestión es que le pusieron un suculento sueldecito sino para premiar su encomiable labor de estratega político como director de campaña, al menos para contentarlo y que pudiera ir tirando hasta que Susana Díaz, enemiga de boquilla de las Puertas Giratorias que tanto critica, le buscara algo a medida.
" El problema" nuevamente entre comillas como pueden ver, es que la capacidad gestora del protagonista no da para mucho y Susana no encontró nada a la medida del nene, hasta que no hace mucho llegó la luz y como en esto de la comunicación, de los medios, las ondas, etc entra todo Dios, Susana va y decide colocarlo a pesar de su nefasto hacer como director de la campaña política del PSOE de Almería y de no tener pajolera idea de Televisión, como consejero en la RTVA y sueldo de 63.000 euros.
En política falta un poco de verguenza torera y un mucho de dignidad. Unos por criticar las puertas giratorias cuando no se bajan de ellas y montan a los suyos y otros por la indecencia de no decir " no, Susana yo de eso no sé."
Gabriel Sánchez
Si (
No(
