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Así queda el mercado con la nueva ley del alquiler
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Así queda el mercado con la nueva ley del alquiler

viernes 05 de abril de 2019, 20:25h
Por 33 votos a favor, 31 en contra y una abstención, los diputados que conforman la Diputación Permanente del Congreso han convalidado el Real Decreto-Ley de medidas urgentes en materia del alquiler de viviendas. El Gobierno de Pedro Sánchez saca adelante las seis normativas que se votaban en esta Diputación Permanente.

Así queda la duración de los contratos de alquiler con la reforma del PSOE, convalidado por el Congreso de los Diputados, pero debatido en la Diputación Permanente en vez de por el Pleno de la Cámara Baja, después de que se decretara la disolución de las Cámaras de la XII Legislatura, el pasado 5 de marzo.

Se hacía necesario el voto favorable de, al menos, 33 diputados para convalidar los decretos leyes. Y ese ha sido justo el número de diputado que han votado a favor del nuevo formato de contratos de alquiler de viviendas, entre otras medidas. 31 votos en contra y una abstención decidieron el resto de diputados pertenecientes a esta Diputación Permanente, en estricto orden de representatividad al Pleno del Parlamento.

El Gobierno ha logrado el apoyo de PSOE, Podemos, ERC, PDeCat, PNV, Compromís y EH-Bildu. Mientras, PP y Ciudadanos han votado en contra, y UPN ha decidido abstenerse. La votación de las medidas en materia de alquiler ha sido la má ajustada de las seis que se han decidido en la Diputación Permanente junto al permiso de paternidad, las ayudas a parados de larga duración de más de 52 años, las ayudas a la estiba, el Brexit o el superávit de las comunidades autónomas y ayuntamientos.

El Real Decreto-ley 7/2019, de 1 de marzo, de medidas urgentes en materia de vivienda y alquiler lleva vigente desde el pasado 6 de marzo, cuando se publicó en el BOE, y se resume principalmente en el incremento en la duración de los contratos o la contención de las fianzas exigidas, ya contemplados en el decreto de diciembre, a lo que se añade que la subida de las rentas anuales queda anclada al IPC o la creación de un índice de precios de la vivienda. Además, se amplía el plazo para iniciar el proceso de un desahucio del alquiler.

Fernando Encinar: "La convalidación acabará provocando una nueva subida de precios y reducirá la oferta de viviendas en alquiler"

A raíz de la convalidación del real decreto sobre alquiler de viviendas, Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista, explica que “con toda probabilidad, el nuevo Decreto Ley convalidado por la Diputación Permanente acabará provocando una nueva subida de precios, ahora que habían empezado a moderarse e incluso bajar, y además reducirá la oferta de viviendas en alquiler. El Gobierno debería haber contado con el consenso de todo el sector inmobiliario, propietarios e inquilinos, a la hora de escribir este decreto. Serán precisamente los inquilinos los principales damnificados de esta nueva medida, especialmente aquellos de rentas más ajustadas, que sufrirán la escasez de oferta y la complicación en los requisitos de acceso. Cuando los precios vuelvan a subir, no lo justifiquemos porque hay burbuja. La subida de precios a medio plazo será consecuencia directa de la regulación de Sánchez”.

El sector residencial ya se había mostrado en contra de la modificación de las normas referentes al arrendamiento de viviendas. Para los expertos y empresas dedicadas al alquiler traerá más subidas de precio, menos pisos en el mercado e inseguridad jurídica.

El debate del Real Decreto-ley

“El Gobierno sigue apostando por una regulación que afecta a muchos ciudadanos. El nuevo texto presenta determinadas mejoras frente al anterior, como la mayor seguridad para el inquilino, se tratará de estimular e incentivar la oferta y aliviar la carga financiera de las familias para el pago de la renta”, defendió el ministro de Fomento, José Luis Ábalos.

“En España hay una escasez del parque de vivienda social preocupante, con menos del 2,5% del total del parque estatal de vivienda, lejos de países de nuestro entorno como Francia, Reino Unido, Suecia o Austria, por encima del 15%”.

Para la próxima legislatura, el Gobierno ya prepara una Ley Estatal de Vivienda, cuyo borrador se encuentra bastante avanzado, agregó Ábalos.

Por el resto de partidos, primero intervino Marian Beitialarrangoitia (Bildu)criticando el decreto por seguir resistiéndose a movilizar la vivienda vacía y establecer un límite de precios del alquiler. Se debe usar como base para actuar sobre el mercado”.

A continuación, Carles Campuzano (PdeCat) destacó que el problema del alquiler “proviene de la falta de alquileres asequibles, no por culpa del mercado libre. La falta de una política clara de construcción de vivienda pública en alquiler para jóvenes, parados de larga duración. Hacen falta 150.000 millones de euros que trabajar con el sector privado”.

Por el PNV, el diputado Mikel Legarda comentó que “este decreto no contiene la cuestión de fondo del mercado del alquiler: un mercado escaso y caro y la falta de vivienda pública accesible. Esta falta de vivienda pública accesible tensiona el mercado libre. Se moviliza poca vivienda accesible con este decreto y no deja de ser un parche. No se examina la causa de por qué siguen muchas viviendas vacías".

El diputado vasco fue el único que no desveló el sentido del voto de su partido, dejando en vilo a la Diputación Permanente hasta la hora de las votaciones.

Joan Tardá (ERC) confirmó el voto a favor al decreto pese a critica que el decreto se queda corto.

El diputado Rafael Mayoral (Podemos) confirmó su voto a favor del decreto, después de no apoyar la convalidación del decreto anterior en enero “al introducir mejoras como el aumento de los años de contrato y mantener la subida anual sustentada al IPC. Se consigue parar la subida abusiva de alquileres”. Mayoral centró su debate en criticar la inversión en vivienda de los fondos internacional alegando que especulan con el derecho a una vivienda.

Finalmente, Eloy Suárez (PP) reprochó que “es un decreto ley en el tiempo de descuento”, criticando que se convalide en periodo electoral. “Es un decreto intervencionista para el mercado del alquiler. Sus medidas van a suponer es una restricción en la oferta y va a crear dos tipos de inquilinos. Los más desfavorecidos van a ser expulsados del mercado frente a los contratados con un trabajo estable”.

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