La detención de Puigdemont es casi Inevitable una vez que pise suelo español

Carles Puigdemont, el expresidente catalán, ha reconocido que podría ser arrestado si regresa a España.

La orden de detención emitida por el Tribunal Supremo sigue vigente, ya que se ha negado a aplicar la amnistía que su partido había negociado.

Al día siguiente de que las bases de ERC aprobaran el pacto para nombrar presidente al candidato socialista Salvador Illa, y con la votación incierta de una diputada de las juventudes de la formación republicana, Puigdemont ha reiterado su deseo de volver a Cataluña si se lleva a cabo la sesión de investidura en el Parlament.

Según las fuentes jurídicas la detención de Puigdemont es un hecho asegurado en el momento en que pise suelo nacional.

Posteriormente, será puesto a disposición del juez del Supremo, Pablo Llarena, después de varios años de intentos para que rinda cuentas ante la Justicia por su participación en el proceso independentista que lideró desde su Govern en 2017.

Puigdemont podría intentar no ser detenido utilizando el habeas corpus pero los juristas con los que hemos hablado opinan que no le servirá de nada.

Lo normal es que el magistrado tras realizar el interrogatorio determine si existen razones suficientes para enviarlo a prisión algo que podría ser al evadir la justicia por haber estado prófugo y la gravedad del delito por el cual aún está siendo procesado.

Recordemos que la malversación, podría conllevar una pena de hasta 12 años de cárcel.

El expresidente, podría intentar eludir la detención utilizando la ley de amnistía como su argumento principal. A pesar de que el juez ha determinado que dicha norma no abarca la malversación que se le imputa, esta resolución aún no es definitiva. Queda por delante una serie de recursos, con un destino evidente: el Tribunal Constitucional (TC) y la Justicia europea.

Fuentes jurídicas explican que Puigdemont tiene la posibilidad de solicitar ante el TC una medida cautelarísima. Esta medida permitiría que, mientras se determina si se le aplica la amnistía, no se ejecute la decisión del juez Llarena, evitando así un perjuicio en términos de pérdida de libertad, lo que implica que no se llevaría a cabo su detención ni su posible ingreso en prisión.