Ryanair, necesita contratar 600 pilotos.

Lo ha dicho Michael O’Leary ante su junta de accionistas, que refrendó su gestión al frente de la compañía aérea. Y lo hizo a pesar del problema suscitado tras la anulación de hasta 2.000 vuelos hasta finales de octubre.

Según O’Leary el problema ha venido con los cambios en las vacaciones motivados por la legislación laboral irlandesa, que es la que le afecta a su compañía por tener su sede en Dublín.

Las pérdidas económicas por la anulación de los vuelos han sido calculadas en 25 millones de euros entre compensaciones a pasajeros, devoluciones de billetes y pérdidas de explotación. O’Leary asumió lo sucedido como un "error cometido desde la dirección" y anunció que buscan 600 nuevos pilotos.

La oferta a los comandantes y copilotos actuales para que acorten una semana sus vacaciones a cambio de recibir un bonus de entre 6.000 y 12.000 euros no ha tenido la aceptación que esperaba, los pilotos alegan que es solo el precio de un día normal, en vez de una suma extraordinaria, y que además ya han volado las 800 horas anuales estipuladas. Es más el colectivo de pilotos de la compañía ha denunciado su precariedad laboral, denunciando además que muchos pilotos son autónomos y que sus salarios, son inferiores a los de la competencia.

En cuanto a la posibilidad de que pueda haber una huelga, dijo que no sabe como en Ryanair van a organizarla al carecer de sindicato. En cualquier caso, llegó a acusar a sindicatos de otras aerolíneas, aunque sin llegar a concretar nombres, de instigar ese malestar.