Unidas Podemos en Melilla ha mostrado su preocupación por la gestión del Gobierno local del dinero público que envía el Ministerio de Igualdad para el desarrollo de programas y la prestación de servicios que garanticen el derecho a la asistencia social integral a las víctimas de violencia de género y la atención a los menores. En febrero, se acordó en la Conferencia Sectorial de Igualdad el reparto de 8 millones de euros entre las autonomías para este fin.
Gema Aguilar, secretaria general de Unidas Podemos en Melilla, cree que no se están encauzando correctamente los fondos “porque hay víctimas que no están recibiendo una atención adecuada”.
Aguilar ha puesto el ejemplo de la víctima de violencia de género de Reina Regente, un caso muy mediático, pero al que nadie le presta ya atención. “No puede ser que esta mujer y sus hijos se vean obligados a vivir en la casa donde casi la matan. Una vivienda que, además, está destrozada a raíz de una investigación judicial”, detalla Aguilar.
La líder de Unidas Podemos asegura que a esta mujer la tuvieron hacinada en una habitación de hotel con sus hijos durante 40 días. “No puedes tener en un hotel a una mujer y a unos niños tanto tiempo. No se puede vivir así. Es una víctima a la que las administraciones públicas están castigando”, critica.
Aguilar ha detallado que, tras los 40 días en el hotel, la Ciudad Autónoma le ofreció quedarse en las casas de ayuda gestionadas por distintas asociaciones, pero no cumplía los requisitos porque uno de sus hijos, que acaba de cumplir 18 años, no puede estar allí cuidando del resto de menores cuando ella se va a trabajar.
Soluciones
Desde Unidas Podemos reclaman al Gobierno local y a la Unidad Contra la Violencia de Género Melilla que trabajen de forma conjunta para solucionar este problema de forma definitiva. “Sabemos que han estado encima de este caso y que la situación es difícil, pero nuestra obligación como sociedad es solucionar este tipo de situaciones tan graves”.
Del mismo modo, Aguilar proponer que la Ciudad Autónoma tenga disponible un parque de viviendas públicas para estos casos. “Las víctimas de violencia de género necesitan una vivienda digna en la que rehacer sus vidas. Un hotel o una casa de acogida debe ser algo temporal. Muchas de ellas no pueden acceder al mercado del alquiler por cuestiones económicas. Tenemos que ayudarlas”, ha detallado.
Aguilar ha sido más crítica con EMVISMESA. Detalla que días previos a la agresión que casi le cuesta la vida intentó gestionar la búsqueda de una casa para salir del infierno en el que vivía. “La trataron como si fuera basura. Como si su caso no fuera urgente. Tras la agresión volvió a ir y más de lo mismo”, finaliza Aguilar.
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