El Partido Popular ha arrasado en Andalucía colocando el azul en todas y cada una de las provincias obteniendo 58 escaños y obteniendo como premio poder gobernar sin apoyos externos al conseguir tres escaños más de lo que necesitaba para poder gobernar en solitario.
El batacazo Partido Socialista es histórico, obteniendo con 30 diputados el peor resultado de su historia. De igual manera que VOX parece haber tocado techo, los socialistas liderados por un un continuista del susanismo como Juan Espadas que prometió aires nuevos y parece habérsele olvidado, ha tocado fondo. El desencanto de los votantes socialistas se ha visto claramente reflejado en los resultados, pero para ser sinceros, no ha habido sorpresa ya que era algo que ya se veía venir dada la nula ilusión que el candidato socialista ha despertado tanto en la militancia como en los votantes que han visto como lejos de romper con el susanismo y los susanista marcando una línea propía , se ha agarrado a las faldas de los discípulos de Díaz y los ha mantenido en las direcciones provinciales.
Pero si en el PSOE no dan crédito a lo sucedido, en Vox, el partido de extrema derecha, que con la " andaluza de Salobreña" Macarena Olona pensaba ser esa fuerza política necesaria el desencanto es total. La gran insultona de la política española no ha tenido el tirón que los cachorros franquistas que dirigen el partido pretendían. Con 14 escaños en la cámara andaluza se quedan en tercer lugar pero sin poder seguir chantajeando al gobierno andaluz como hicieran en la pasada legislatura.
Por otro lado, nada fuera de lo lógico con las izquierdas a la izquierda del PSOE. La división de Podemos lejos de sumar a restado de igualo manera que ha restado, y de qué manera Ciudadanos que de veintiún diputados a pasado a tener cero, despues de que ese bailarín de la política que es Juan Marín, tras marcarse un chotis con el PSOE, cambiara de pareja agarrándose en un pasodoble al PP para ahora desaparecer de la pista de baile que era para él, el Parlamento autonómico. Ciudadanos suma en Andalucía una nueva debacle histórica mientras Juan Marín confía en la benevolencia de Juanma Moreno y como gran vividor de la política espera que su entrega sea recompensada con la aceptación de su entrada en el PP.
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