En las últimas semanas se está cuestionando la encuesta realizada sobre la retirada del muro del parque Hernández, sin embargo, no es la única encuesta popular que se ha quedado en “agua de borrajas”.
En el 2019, al poco de iniciar la legislatura, todo era buenas intenciones en la nueva corporación local. Uno de los objetivos estrella fue hacer partícipes a los melillenses en la elaboración de los presupuestos mediante sus propuestas para la ejecución de proyectos que mejoran la ciudad.
Nos aproximamos a los tres años desde que La Consejería de Distritos, Juventud, Participación Ciudadana, Familia y Menor publicó en julio del 2019 la “INICIATIVA DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA” PRESUPUESTOS PARTICIPATIVOS MELILLA 2020” y todavía estamos esperando que las consejerías responsables las lleven a cabo.
Entre los proyectos más votados, se encuentran el “Jardín vertical y aparcabicis” en la entrada del “CEPA Carmen Conde”; “Energía Fotovoltáica, “Pasos peatones LED”, “Badenes inteligentes”, “Melilla Surf House”, “Marquesinas de última generación”, entre otros.
Los proyectos que destacamos son precisamente los que estarían más vinculados con una Melilla Verde y con el fomento del turismo, tan pregonados en los últimos tiempos por los componentes de nuestro gobierno, tanto de CPM como del PSOE. Todos estos proyectos están en íntima relación con los objetivos que parece que desean los responsables de nuestra ciudad: un mayor compromiso con el medio ambiente y el impulso del turismo.
A pesar de haberse aprobado estos proyectos, a los que se le asignaba un total de 3.200.000 euros, de los que 1.060.000 euros irían destinados a los proyectos que hemos mencionado, todavía estamos a la espera de que se ejecuten.
Nos tememos que finalizará la legislatura y no verán la luz. Parece que a nuestros gobernantes ni les interesa la opinión de los ciudadanos, aunque se la pidan, ni las iniciativas que no provengan de sus propias consejerías. Parece que están sordos y ciegos a todo lo que no provenga de sí mismos.
Exigimos, como ciudadanos y como partido político que se deje de jugar con la opinión de los ciudadanos, que se deje de utilizar para amparar decisiones propias y ajenas al interés y beneficio de los melillenses, exigimos un gobierno coordinado, no un “reino de taifas”
Ignorando las propuestas de los propios ciudadanos evidencian el valor que para los gobernantes de la ciudad tiene la voz del pueblo, así como el compromiso y deseo de hacer realidad una Melilla, más comprometida con el medio ambiente y abriendo nuevas posibilidades a la creación de empleo y prosperidad.
Si (
No(
