Son numerosos los temas incandescentes, el primero sin lugar a duda, es el del Mar Menor, que trae cola y que la seguirá trayendo, pero no pretendo ser gafe. Me sigo sorprendiendo de que el responsable de esta catástrofe -que a la postre sabemos que tiene nombre y apellidos- se haya ido de rositas.
Es cierto que son muchos factores los que han influido en esta debacle ecológica, no obstante, se puede deducir que el ejecutivo regional ha caído en una dejación de funciones por falta de control de los vertidos a la laguna salada, generados por la agricultura intensiva, y que desde luego el gobierno autonómico debería de responder hoy. Su máximo representante López Miras ha sido astuto y le ha sabido endosar “la Bafada” al Ejecutivo nacional; reconozco que es la jugada magnífica del PP regional en el 2021.
También “hogaño” nos deja otro regusto amargo para los pueblos de Mazarrón, Totana,Lorca y Águilas y que ha sido el colmo de los colmos, al dejar a la Comarca del Guadalentín sin comunicaciones férreas y con una tercermundista conexión con la capital por vía rodada. Se habla de que para hacer la tortilla hay que romper los huevos, y que todo este retraso es para invertir en futuro, sin embargo, no olvidemos que la circunstancia también tiene un responsable concreto.
Esta situación subdesarrollada y precaria del Sureste murciano, hubiera tenido arreglo hace 15 o 20 años si el Sr. Valcárcel hubiera aceptado el trazado del Ave por Elche y Novelda que le ofreció el Ministro de Fomento Pepe Blanco, pero el presidente de antaño, se negó rotundamente y se encabezonó en su negativa en aras de un trazado que pasara por Cieza. Se dejaron titulares interesantes como que “El Presidente Ramón Luis Valcárcel no se reunirá con el Ministro José Blanco hasta que no se garantice que habrá progresos” y desde luego que no los hubo hasta el día de hoy, que nos hallamos con una Murcia que perdió su tren, no solo el del AVE sino el del desarrollo y avance, pues estamos condenados al ostracismo y a la pérdida de oportunidades para lustros o quien sabe si décadas.
En definitiva, los que no somos ni “barrigas verdes” ni “Aladroques” es decir los que vivimos en esta zona del sureste de la Comunidad, viajar a la capital se hace misión imposible o al menos odiosa, puesto que no solo no hay vía férrea que vertebre la Región, sino que solo disponemos de un transporte público de enésima categoría y el uso de los coches privados reclama con urgencia una tercera vía de A-7, por cuanto la autovía del Mediterráneo en su paso por Murcia es una de las carreteras más congestionadas de España, por encima de Bilbao. Esto es lo que hay, y en este tiempo de Navidad menos mal que ahora podemos hacer las compras del Corte Ingles por internet.
Si (
No(
