El 18 de mayo de 1991 se convirtió en la primera astronauta británica, tenía 27 años y había sido seleccionada entre 13.000 aspirantes. La misión duró ocho días y acompañó a los astronautas soviéticos Anatoly Artsebarsky y Serguéi Krikaliov.
Recientemente hemos vuelto a saber de ella por unas declaraciones en el diario The Guardian, declaraciones que han levantado gran expectación : "Los extraterrestres existen y quizá viven en la Tierra, pero no podemos verlos"
Su argumentación no está falta de lógica : "Hay tantos miles de millones de estrellas en el universo que debe haber todo tipo de formas de vida diferentes. ¿Serán como tú y yo, compuestos de carbono y nitrógeno? Tal vez no. Es posible que estén aquí ahora y simplemente no podemos verlos”.