Desde que Pedro Sánchez se impusier en las primarias del PSOE a Susana Díaz , esta no dejado de ponerle zancadillas, utilizando incluso a antiguos dirigentes como Guerra o González que se han venido encargando de criticar a Sánchez y poner en entredicho su liderazgo y actuaciones.
Antes de ello Susana fue ideóloga de una trama y verdugo del socialismo, al poner en práctica una política donde las bases del partido nada tenían que decir para matar al que era su secretario general. En esta trama fue ayudada por los barones, que junto a ella se arrogaron la propiedad del partido, en contra de la opinión de mayoría de afiliados y simpatizantes que no se lo perdonaron y volvieron a darle la secretaría general del partido, al ahora Presidente del Gobierno.
Así la que se creía duelña y señora vio como milagrosamente y de manera inesperada ganaba su enemigo. Pero Susana no contenta, lejos de aceptar la derrota presentó armas e impuso que en Andalucía mandaba ella y en un ataque de soberbia eliminó cualquier huella de sanchismo en las listas, pero los socialistas andaluces la volvieron a castigar y más de 500.000 se abstuvieron y Susana perdió, como posteriormente perdería todos los puestos para los susanistas en la ejecutiva federal.
Sánchez le impuso las listas electorales desde Ferraz y Susana se quedó sin influencia en el grupo parlamentario en el Congreso y por consiguiente , sin el poder que tenía. Desde entonces, la pérdida de poder de la secretaria general del PSOE andaluz es cada vez mayor. La puntilla se la ha dado Sánchez colocando a Alfonso Rodríguez Gómez de Celis en la vicepresidencia segunda de la Mesa del Congreso.
Aquella gestora que Susana Díaz colocó en Ferráz le ha salido cara. Ahora, para colmo se le han ido retirando los barones.
Tal es la situación en el socialismo andaluz pesa más el alcalde de Dos Hermanas Francisco Toscano, Gómez de Celis, la cordobesa Carmen Calvo y hasta María Jesús Montero que Susana Díaz.
Ahora el siguiente paso de Ferraz es intervenir en la elección de los presidentes de las diputaciones andaluzas tras la cita del domingo, algo que Sunana quiere evitar, pero no puede. Cuando toque nombrar a los presidentes de las diputaciones andaluzas a Díaz solo le quedará la pataleta, para las presidencias de Diputación, Ferraz tiene la última palabra.
Susana se agarra al sillón, aun sabiendo que lo suyo es la CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA, que en esa lista de renovación del PSOE andaluz, ella ni está , ni la quieren.
Díaz ya no controla el partido en Andalucía como lo hacía. Con la llegada de Pedro y esos seiscientos mil votos conseguidos de más en las Generales en Andalucía, han empezado a salir disidentes susanistas como setas. Díaz ya no controla férreamente ni siquiera a los suyos.
Y lo peor es que ni siquiera los suyos se creen lo que tanto cacarea apuntándose como propia la remontada en Andalucía en las generales.
En Ferraz no hay prisa, van tomando posiciones poco a poco, sumando adeptos, muchos de los cuales se caen de las filas susanistas, reforzando a sus interlocutores y minando el poder de la baronesa que no repetirá como candidata a la Junta a pesar de lo que ella viene trasladando.
La andaluza tras el desahucio en San Telmo no para en Sevilla y copiándo a Sánchez se dedica a hacer kilómetros recorriendo Andalucía, para ver sus apoyos. Pero sean muchos o pocos son menos cada día aunque sean los que sean, seguirá diciendo que cuenta con el apoyo de la mayoría de la militancia andaluza.
Si (
No(
