La actitud "prepotente y chulesca" de Albert Rivera, tras la reunión conPedro Sánchez en Moncloa, ha colmado la paciencia del presidente del Gobierno que ya no está dispuesto a escuchar al líder de la formación naranja.
Publicaba el Confidencial Digital que tras la reunión, Pedro Sánchez confirmó que "con Ciudadanos no hay nada de qué hablar y negociar".
Sánchez albergaba la posibilidad de que Ciudadanos se abstuviera y dejara gobernar al partido más votado. Pero Rivera no está dispuesto y pondrá cuantos palos en las ruedas pueda. Ante esto el lider socialista se ha cansado y si Ciudadanos no ha querido entenderse con el PSOE, este tampoco cederá,y hará lo posible para vetar al partido naranja de la Mesa del Congreso. Algo que muy posiblemente consiga con la ayuda de Podemos.
De este modo, el PSOE podría dar los dos escaños que, a priori, eran para Ciudadanos en la Mesa del Congreso a ERC y a PNV, las fuerzas ganadoras en Catalunya y en el País Vasco.
En un principio, las intenciones socialistas eran las de formar la Mesa del Congreso sin Vox, repartiendo el pastel de la siguiente forma: tres representantes para los socialistas, dos para el PP, Podemos y Ciudadanos.
Algo que podría hacer el PSOE debido a que contaría con "mayoría absoluta" de las "fuerzas progresistas" de la Cámara para dar soporte a un reparto sin Vox ni C's y sí con ERC y PNV al contar con un total de 187 votos a favor: 123 del PSOE, 42 de Unidas Podemos, 15 de ERC, 6 de PNV y 1 de Compromís.
Recordemos que en la pasada legislatura PP y Ciudadanos unieron sus fuerzas en la mesa del congreso para obstruir las propuestas del PSOE.
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