Fuentes judiciales han confirmado que asimismo, en el escrito el ministerio público solicita además que se cite a declarar como testigo a una docena de personas más, entre ellas el pocero que realizó la perforación en busca de agua, el maquinista que abrió la zanja en cuyo extremo estaba el pozo, y que según el dueño de la parcela era para construir un muro de contención, aunque también, los padres del pequeño.
Según la versión del pocero, fue al abrirse esta zanja cuando se dejó al aire el pozo por donde se precipitó el pequeño.
El dueño de la finca insiste en que el pocero dejó el tubo sin tapar, según declaró en una rueda de prensa, donde añadió que fue él mismo quien colocó dos ladrillos de hormigón para impedir que nadie pueda tropezar y hacerse daño.
Hemos conocido que la Guardia Civil ya ha remitido un segundo informe, ampliatorio del primero y en el que se puntualiza con algunas hipótesis de lo que sucedió.
El cuerpo de Julen fue encontrado a las 01.25 horas de la madrugada del sábado 26 de enero por los equipos de rescate , se encontraba a algo más de 70 metros de profundidad. Pozo que no contaba con permiso de perforación. Tampoco las obras que el dueño del terreno llevaba a cabo contaban con autorización alguna. A ello se añade un informe de los investigadores que recoje las declaraciones testificales del que hizo la prospección y del dueño de la finca, en las que aparecerían numerosas "contradicciones".
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