Arrieta, no fue un cualquiera en la banda terrorista. Cuando fue detenido era el responsable político de la zona de Rentería.

Fue condenado a seis años de cárcel por tenencia ilícita de armas aunque sólo cumplió un año de prisión tras beneficiarse de la amnistía decretada tras la muerte del dictador. Franco en 1976. Pasó a formar parte de la EIA, el ‘Partido para la Revolución Vasca’ hasta que decidió dejar la “militancia activa”.

Sin embargo su postura no ha variado, al parecer la de Podemos tampoco por más envoltorio que le ponga , Arrieta es claro defensor de la independencia del País Vasco y Podemos con un fichaje tal, es seguro que también.

Arrieta es además miembro de la plataforma Gure Esku Daogo, que defiende el ‘derecho a decidir’ del País Vasco pero, además, es partidario del acercamiento de los presos de ETA a las cárceles del País Vasco. Por ello, participó durante un acto de campaña frente a la cárcel de Martutene con la candidata al Congreso, Nagua Alba, para que existiera una “total empatía con las víctimas, con todas las víctimas”.

Arrieta siemmpre ha defendido que el País Vasco debe contar con un gobierno propio. Tanto es así que Josetxo Arrieta ha señalado que el Senado debería tener una función propia para hablar de las cuestiones independentistas. “Sino, será mejor cerrarlo”, dijo.

Una vez aprobada la Constitución de 1978, Josetxo Arrieta se incorporó a Euskadiko Ezquerra (EE) como muchos otros arrepentidos de ETA. Fue concejal de este partido en Irún durante ocho años, entre 1987 y 1995. Ahora, una vez jubilado después de trabajar durante más de tres décadas como profesor de Primaria, ha decidido reincorporarse a la vida política a través de Podemos.
“Entré en ETA porque era muy joven y eran otros tiempos.. creo que hubo mucho de aventurismo en mi decisión”. “Enterré la pistola en el cementerio”

El papelón no obstante es el de Podemos que en Cataluña se posicionó a favor del independentismo, más tarde en contra, luego en contra del artículo 155 y ahora con este fichaje estrella pretende trasladar el problema catalán a Euskadi.