Tras la apuesta de Juan Carlos Campo como titular de Justicia, el Consejo de Ministros propondrá para ocupar la Fiscalía General del Estado a la anterior ministra como Fiscal General del Estado, algo que no ha sentado nada bien en el PP que se mostraba felíz por su relevo al frente del Ministerio de Justicia.
El Ejecutivo buscaba a una persona de confianza y esta es sin duda, Dolores Delgado que tendrá que dejar el escaño.
Delgado será nombrada por el Rey a propuesta del Ejecutivo de Pedro Sánchez y su cargo será aprobado en el Consejo de Ministros extraordinario que se celebrará este martes.
Dolores Delgado es una fiscal de corte progresista, miembro de la Unión Progresista de Fiscales. Gran parte de su carrera la ha ejercido en la Audiencia Nacional.
Es buena amiga del ex juez y amigo Baltasar Garzón, al que apoyó ante su enjuiciamiento y expulsión de la carrera por el caso Gürtel.
El nombramiento de Dolores Delgado como nueva fiscal general del Estado ha causado primero sorpresa y después malestar en el PP Y en el sector conservador de la justicia.
La Asociación de Fiscales de caracter conservador y mayoritaria entre los fiscales, critica la decisión de Sánchez y acusan al Ejecutivo de no respetar la división de poderes, sin embargo nunca se pronunciaron en contra de los nombramientos de Rajoy porque en aquel entonces el elegido era uno de los suyos.
Delgado no es militante socialista, llegó al Gobierno como independiente aunque ha hecho campaña a favor del PSOE, además de ser elegida en las listas socialistas para el Congreso.
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