Villarejo, en la cárcel por el Caso Tándem, reconoció ante el juez que había participado en el espionaje a Pablo Iglesias con el objetivo de que Podemos no llegara al Gobierno.
Supimos además de un móvil sustraido auna colaboradora de Pablo Iglesias y que tenía datos personales del lider de podemos que al parecer se habrían utilizado contra él.
Conocimos también que con Jorge Fernández Díaz al frente del ministerio del Interior, se pagó el viaje y el alojamiento del venezolano Rafael Isea para que “probara” la presunta financiación del régimen de Maduro a Podemos; y que existe un audio que implica directamente al ex ministro con la trama de espionaje contra Iglesias.
A partir de ahí el suelo comenzó a moverse bajo los pies del exministro Fernández Díaz al que Podemos pretende sentar en el banquillo.
Pablo Iglesias exigió a Pedro Sánchez y al ministro Marlaska el cese inmediato del inspector jefe José Ángel Fuentes Gago, todavía en la Policía Nacional, por ser el enlace de Isea y por traerle a España con todos los gastos pagados y el asunto se llevó por delante también al numero dos del area de comunicación de Moncloa y exdrector de Interviu, Alberto Pozas por entragarle a Villarejo en un pen-drive el volcado del teléfono robado.
Por este motivo Podemos y Pablo Iglesias han anunciado la querella contra Fernández Díaz y también el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, al considerarles los impulsores de la “mafia policial” cuyo objetivo era que la formación morada no llegara al Gobierno.
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